El conflicto entre los señores del orden (o la ley) y los señores del caos no es algo nuevo y teniendo en cuenta que Wanda Maximoff es una mutante con poderes que provienen de la magia del caos… pues ya está casi todo dicho. Panini Comics saca la desbrozadora para dejar limpia la senda de las brujas y facilitar el camino de la Bruja Escarlata.La inevitable visión del pasadoEste tomo de la Bruja Escarlata ha provocado que mi mente viajase a mi tierna juventud (este año cumplo los 50). Y lo ha hecho evocando ante mí una imagen ciertamente relevante en cuanto a mis lecturas sobre fantasía. Podré pareceros un hereje por la siguiente afirmación… y seguramente lo sea, pero siempre he sido más de Michael Moorcock que de J.R.R. Tolkien.Las descripciones meticulosas del autor del Silmarilion, El Hobbit o El Señor de los Anillos siempre me han resultado pesadas de leer. Sin embargo Moorcock es capaz de crearte un ejército en una página y a la siguiente lo ha liquidado. No le quito ningún mérito a Tolkien, su universo es de una riqueza incomparable pero cuando leo le pido un poco más de agilidad a las historias.En función de esto, la referencia exacta hacia esta Bruja Escarlata es la de los señores del orden y el caos. En este volumen nos encontramos con la reaparición de La Doliente al Final de Todas las Cosas, una creación de Dan Slott para su etapa de Los Cuatro Fantásticos, como divinidad de la ley a la que se opone La Reina Nunca (también creación de Slott pero en su Estela Plateada junto a Mike Allred), justo el paradigma contrario, una diosa que abraza el azar, las probabilidades, el rechazo al control.Si Arioch, Xiombarg, Chardros o Mabelode conociesen a La Reina Nunca la considerarían una de ellos. Por tanto el reto está servido, caos contra lo que debe quedar escrito y ser tomado por norma.Una muerte en la familiaNo, esto no es una colección de Batman, pero en una reunión de Pietro, Wanda y Lorna (Polaris), uno de ellos pasará a otro plano de la existencia tras enfrentarse a La Doliente. Sí, es La Bruja Escarlata, sucede al principio del tomo, y le tocará recorrer un camino que lleva un tiempo de actualidad, La Senda de las Brujas.Todavía alguno podrá tararear la pegadiza canción de la seríe Ágatha, ¿quién si no?, pero la referencia en el cómic nos lleva a la etapa de James Robinson, precisamente al recopilatorio de su etapa que lleva por título precisamente “La Senda de las Brujas”. A Wanda le tocará un breve periplo por la misma para regresar a un nuevo cuerpo que ya será trabajo de otros de los implicados.Para ello es importante tener presente uno de los conceptos que lleva explorando Steve Orlando desde que se hizo cargo de los mandos del destino de La Bruja Escarlata, La Última Puerta, aquella que franquean los que ya no tienen más esperanza. Por en medio tendremos a Darcy Lewis trayendo a la aventura a otro personaje rescatado para la ocasión, Lore, una contrapartida orcura de nuestra protagonista que nos presentaron allá por los noventa Andy Lanning y Dan Abnett. Como podéis ver Orlando ha hecho los deberes a conciencia, eso sí, todo de grandes referentes.Un cruce inesperadoPara rematar el volumen, tenemos una historia que junta a Wanda con Matthew Murdock, Daredevil. El origen de la misma bebe de un especial titulado Crypt of Shadows. Se trata de la primera vez que ambos personajes comparten una aventura los dos solos, pues sus anteriores coincidencias se habían llevado a cabo en marcos mucho más grandes, como crossovers o eventos multitudinarios. Sin embargo ambos no habían tenido el gusto de enfrentarse hombro con hombro a ningún villano, en este caso uno sobrenatural que habita bajo la Cocina del Infierno, El Albañil.Se encargan de los trazos a lápiz Jacopo Camagni, Russell Dauterman y Lorenzo Tammetta. Dauterman además firma las portadas de todos los episodios. Sin duda su acabado es mucho más brillante que el de Camagni en el número en el que interviene pero no hay que restarle méritos al italiano, sus splash pages son espectaculares. El final del tomo nos deja un regreso importante que afrontaremos en futuras entregas de La Bruja Escarlata. Y por si todavía no te está resonando la cancioncilla de marras te dejo los primeros versos de su estribillo. “Larga, yerma y cruel nuestra senda es.”Esta noticia ha sido publicada por Cinemascomics.com