La tranquilidad de Zahora, una entidad local autónoma perteneciente a Barbate, se vio abruptamente alterada el fin de semana por un suceso del que todavía no se han recuperado los vecinos de la zona. Eduardo, un vecino de 57 años muy querido en esta ELA barbateña, fue hallado muerto con varios disparos en la cabeza en su huerto, poco después de haber protagonizado una discusión con Luis, conocido como El Cachila, de 58 años, su vecino y presunto autor del crimen.[articles:335304]Según el relato de quienes los conocían, el origen del enfrentamiento podría estar en los animales de corral que Eduardo tenía en su finca: gallinas, gallos y pavos cuyo cacareo generaba malestar en su presunto asesino. Las diferencias entre ambos se gestaron tiempo atrás y Luis, cazador y con licencia de armas, llegó a amenazar en alguna ocasión a Eduardo, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida cerca de las dos de la tarde por su esposa. La Guardia Civil fue alertada de inmediato y puso en marcha un operativo para localizar al presunto agresor.Una discusión previa en la Venta CurroLas sospechas se centraron rápidamente en Luis, con quien Eduardo había discutido apenas unas horas antes en un establecimiento local, la Venta Curro, tras su regreso de la Feria de Medina. Allí, la conversación derivó en una discusión por el ruido de los animales, y según testigos presenciales, Eduardo optó por retirarse sin entrar en más provocaciones. Su gesto no evitó el desenlace fatal.[articles:335335]Al día siguiente, mientras la Guardia Civil intensificaba la búsqueda del principal sospechoso, Luis fue hallado sin vida. La hipótesis de los agentes apunta a que se trató de un suicidio cometido en el contexto de la investigación abierta por el asesinato de Eduardo.Sorprendido un día antes conduciendo bajo los efectos del alcoholEl día antes del crimen, Luis había sido sorprendido conduciendo bajo los efectos del alcohol, motivo por el que le fue retirado el carné de conducir por parte de la Guardia Civil. Personas cercanas al entorno explican que arrastraba problemas con el alcohol tras un periodo complicado debido a una separación de pareja.Este episodio, con dos muertes en menos de 48 horas, deja una herida profunda en Zahora, donde vecinos y familiares intentan ahora entender cómo una disputa vecinal por el ruido de unos animales pudo desembocar en una tragedia de estas dimensiones. La investigación, no obstante, todavía no se ha cerrado y serán los análisis genéticos de unas muestras de sangre las que pondrán punto y final a esta crónica negra que ha alterado la paz de la citada ELA de Barbate.