Mario Rodríguez, ex-alcalde del pequeño ayuntamiento ourensano de Esgos (de alrededor de 1.100 habitantes), dejó su cargo a comienzos de junio, después de 14 años en el gobierno local. Podría ser un hecho normal, pero llamó la atención un movimiento que se produjo tras su partida y que generó una pintoresca anécdota. Al sucederle el número 2, José Antonio Blanco, tuvo que entrar un suplente de las listas para la concejalía que este dejaba libre y, el primero de estas, renunció. Fue así como entró Laura Blanco, suplente número 2 y nieta de la única concejala de Esgos, Milagros Pérez. Así, se creó una curiosa estampa: las dos únicas mujeres del gobierno local de este ayuntamiento son abuela y nieta.Laura, enfermera y ahora concejala de asuntos sociales"Siempre me interesó la política", explica Laura, de 21 años y estudiante del grado Enfermería. “Mi abuela ya llevaba un tiempo en el gobierno y yo era suplente”, sigue explicando la joven, que siempre vio en su abuela un referente en este mundo. De momento lleva poco tiempo, pero está muy contenta: “Al ser la concejalía de asuntos sociales es algo más fácil de llevar para ser mi primera vez en el gobierno porque me pueden ayudar las asistentas sociales”. “El ayuntamiento es pequeño, la gente está contenta y me facilitan mucho las cosas”, sentencia la joven, que se está estrenando en la política y que, de momento, puede conciliar bien con sus estudios. De hecho, al comenzar en junio, le cuadró perfectamente con el calendario, ya que terminó sus clases.Milagros, una abuela orgullosaMilagros Pérez, la abuela de Laura, lleva 18 años en la política municipal en Esgos. Ahora es teniente de alcalde, aunque anteriormente fue concejala también de asuntos sociales e incluso de obras. Antes, se dedicó también al mundo de la limpieza en Ourense, aunque se jubiló hace unos años de esta faceta profesional.Sobre la entrada de su nieta en el gobierno, cuenta: “Nunca pensé que fuese a entrar, al estar de segunda, no tenía por qué, pero al renunciar el primero…”. “Ella está muy contenta, estamos contentas las dos y en casa también”, sigue. Milagros en dos años, adelanta, prevé dejar el mundo de la política. Confía en ella, en su potencial como joven y, además, cree que no habrá problema en juntar familia y trabajo: “Hasta ahora hemos coincidido poco porque ella lleva poco tiempo y sigue con los estudios, pero además no hace falta ayudarla mucho”."Estoy contenta, satisfecha de que se tire hacia la gente joven y especialmente en un ayuntamiento tan pequeño de apenas 1.100 habitantes", sentencia la abuela más orgullosa de su nieta que puede haber ahora mismo en todo Esgos.Desde luego, Laura tiene un ejemplo claro a seguir y una guía en su nueva faceta como concejala. Así, les esperan dos años de trabajo mano a mano antes de que su abuela deje el mundo de la política local en el que la veinteañera todavía acaba de entrar.Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com