Alemania, o mejor dicho, su industria fuertemente orientada a las exportaciones, no puede permitirse el lujo de dilatar las negociaciones para llegar a un acuerdo arancelario con Estados Unidos. El canciller alemán, Friedrich Merz, dejó clara su posición en Bruselas al término del Consejo Europeo en la noche del jueves: mejor un acuerdo “sencillo y rápido” que caer en unas negociaciones “demasiado complicadas”. Pero en otra demostración de la imprevisibilidad de la agenda económica de Donald Trump, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, dijo este viernes en una entrevista con Fox Bussiness que no descarta que el plazo del 9 de julio puesto hace semanas por el presidente de Estados Unidos para alcanzar decenas de acuerdos comerciales con sus socios, en mitad de la ofensiva arancelaria que Trump lanzó a su regreso a la Casa Blanca, se retrase. Seguir leyendo