El sueño americano de Narciso Barranco acabó en un anodino centro comercial de Santa Ana. El jardinero de 48 años podaba los arbustos el sábado en Pacific Center, donde hay un Home Depot, un comercio que se ha vuelto un objetivo común para los operativos de los agentes federales que están arrestando indocumentados en todo el sur de California. La fortuita detención de Barranco, quien estuvo en el lugar y en el momento equivocados, ha provocado indignación por la violencia con la que se llevó a cabo. También ha dejado caer un grueso manto de miedo sobre las comunidades latinas de la región. Seguir leyendo