Los acrónimos esconden, a veces, algo de lírica. La Empresa Provincial de Información se apoda Epicsa y es una de las áreas más desconocidas de la Diputación Provincial de Cádiz. Información "qué bonito nombre tienes", decía la canción. Y qué desconocido.Otra paradoja. En pleno despegue del imperio digital en el mundo, la rama institucional que maneja la "información" oficial de los ciudadanos, sus codiciados datos, todos sus trámites, trabaja discretamente camuflada bajo la grada de un estadio de fútbol, el Nuevo Mirandilla de Cádiz.Si se le echa un poco de cuento cinematográfico, parece el escondite perfecto para una organización secreta pero la prosaica realidad dice todo lo contrario: la transparencia, la seguridad, la interconexión y el rigor son elementos fundamentales en un oficio esencial.El director gerente de la empresa pública explica detalles del nuevo equipamiento informático de Diputación. REYNA Su trabajo es manejar, custodiar y procesar los valiosos números y registros de hasta un millón de gaditanos (la población total de la provincia ronda los 1.300.000 habitantes).También preparar y mantener todo el aparataje necesario que reúne la Diputación Provincial, ya sea un modesto portátil, el PC de un trabajador o un servidor gigante. Todo el material tangible y duro (hardware) ligado al vertiginoso mundo informático que ha pasado a dominar las vidas de todos.Entre ambas funciones, una básica: programar. Crear los portales, sistemas y herramientas informáticas que no podemos tocar, los que funcionan dentro de las pantallas (software), los que utilizan todos los trabajadores de la corporación provincial y los usuarios para hacer trámites u obtener información.El campo de actuación de Epicsa va más allá de la Diputación Provincial. Salvo los ayuntamientos de Jerez y Cádiz (que suman casi 350.000 habitantes) el resto de los trámites municipales en la provincia corren por cuenta de esta empresa pública."Lo de los vales descuento en bares y restaurantes lo lleva la Cámara de Comercio", dice con humor y alivio Galán, el director de esta sociedad pública.[Estamos también en WhatsApp, en Telegram y en Bluesky. Síguenos] A cambio, les tocan otros atascos, por ejemplo "cuando salen convocatorias de empleo público, las famosas oposiciones, tanto para buscar información, fechas, plazas, como para realizar trámites, inscribirse, entra muchísima gente en muy poco tiempo pero el sistema resiste bien".Epicsa nació en 1984, "cuando la primera explosión de IBM, luego de MacIntosh, aquellas pantallas con las letras en verde que todavía no eran planas. Seríamos unos 12 trabajadores, ahora somos 76", rememora. Él ya estaba allí, comenzó como técnico raso.Logotipo de la empresa pública de "información", en la entrada del nuevo conjunto de conexiones y servidores. REYNALa evolución de Epicsa, una gota dentro de la gigantesca ola digital en el mundo, también refleja el avance tecnológico incesante en un sector que ha pasado de la nada al todo. Desde este mes de febrero cuenta con una nueva "nube". Es un Centro de Proceso de Datos que ocupa una habitación y en la que caben, de forma virtual, ese millón de vecinos de la provincia. Su capacidad es de 400 terabytes. Cada "tera" son 1.000 gigas. Cada giga, 1.000 megas. A calcular, con la calculadora del teléfono móvil, claro.El ritmo de innovación tecnológica es tan algo que cuando se presenta una novedad se da por hecha su caducidad. El flamante CPD, que aún tiene espacio físico y digital para crecer, quedará desbordado "en dos o tres años". En ese momento habrá que ampliar instalaciones, capacidades, que otra vez volverán a estar completadas "a los dos o tres años, si no antes, según los avances que se produzcan en ese tiempo. Así funciona esto".Mientras llega la inevitable y cíclica obsolescencia, Epicsa tiene motivos para creer y crecer según su gerente. "Este año tenemos el mayor presupuesto de nuestra historia y, en general, todos los gobiernos anteriores han cuidado este apartado de la Diputación Provincial, han comprendido su importancia".Antonio Galán trabaja en Epicsa desde la creación de la empresa en 1984. REYNA Es raro ver a un técnico satisfecho con el trato recibido por todos los dirigentes políticos, de todos los partidos, pero cuando se habla de informática, el cuidado es imprescindible más allá de ideologías.A la fuerza ahorcan, esa consideración política tiene motivos tan firmes como la Ley 39/40 de 2015 que ya obliga a ofrecer al ciudadano la tramitación y el archivo en formato digital de, absolutamente todos, los documentos administrativos públicos y oficiales.Esa "nube" se ajusta a los tiempos y a la Ley un conjunto de cajas acristaladas, a los lados de un pasillo metálico y plástico, lleno de servidores, cableados y discos. Son archivos y conexiones preparados para conservar y combinar las cifras de los gaditanos, algunas de sus palabras claves.Antonio Galán conoce, y teme, la distancia que los términos técnicos provocan en el ciudadano medio. En cuanto aparecen cuatro palabras complicadas, la tendencia común es a desenchufarse del relato.Prefiere los ejemplos sencillos para detallar el trabajo de Epicsa, en evolución constante desde hace 41 años. Así, recuerda que en estas instalaciones descansa una información que va de los trámites de cementerios al padrón y los nacimientos, toda la información ligada a la demografía."Tenemos que estar muy coordinados con otras instituciones, muchas, por el ejmplo, el Instituto Nacional de Estadística". Por relajar el tono, hasta el alquiler de pistas deportivas de fútbol sala, basket o pádel pasa por aquí.También todo lo económico: nóminas de todos los trabajadores de Diputación y de 43 de los 45 ayuntamientos gaditanos, con sus correspondientes datos fiscales y bancarios. Incluso queda copia de todos los correos electrónicos enviados o recibidos por una dirección institucional de la provincia.Los requerimientos judiciales son frecuentes. La nube, en sus distintos formatos, la nueva y las anteriores, registran inicios y ceses de trabajos, contratos y servicios, comprobaciones diversas que resultan muy solicitadas por los tribunales.El catálogo es tan amplio que Galán resume con un supuesto real: "Si un policía local de Ubrique mete una matrícula en su terminal para conocer los datos de un coche, si está mal aparcado, si es robado o si pesa algún embargo o búsqueda, conecta con nosotros, con los sistemas de Epicsa"."A su vez, estamos conectados con la Dirección General de Tráfico que recibe la solicitud, en unos segundos, y responde a la similar velocidad". El ejemplo de la matrícula y el coche puede trasladarse a trámites con viviendas, nacimientos, cultura, deportes, fallecimientos, todo.Para conseguir estos resultados en pocos segundos es esencial "una fuerte interconexión de nuestras redes con otras mayores, desde las autonómicas a las estatales, incluso con el mundo Google que ya incorpora inteligencia artificial a través de Gemini".Para tranquilidad de los usuarios que tienen media vida en estas instalaciones sin saberlo, en Epicsa hay "una sala ignífuga", una especie de pequeño búnker a prueba de incendios e inundaciones (el estadio está por debajo del nivel del mar) con copias físicas de la información esencial. Hay otro en el complejo El Madrugador, en El Puerto de Santa María.Para decepción de los nostálgicos del papel, esa caja de seguridad está formada por millones de kilómetros de cintas que suman 800 gigabytes. Nada de partidas de nacimiento en folios, ni libros de familia físicos, nada de hojas amarilleadas.Más que las llamas o el tsunami, los enemigos reales son los piratas informáticos, los hackers: "Los malos siempre van por delante. Sufrimos unos 400, 500 ataques al día, como cualquiera. Sólo existen dos tipos de empresas, se dice en este sector, las que ya han sufrido ataques y las que los van a sufrir"."Los intentos de entrar en el sistema ya están automatizados, hace mucho tiempo. Cada vez son más sofisticados, digamos que robotizados. Por ahora tenemos un nivel de vulnerabilidad bajo pero nunca se puede hablar muy alto"."En el Ayuntamiento de Jerez, en el Servicio de Empleo de la Junta, en la Cadena SER, en muchos sitios han entrado hace poco y el destrozo es importante, tardas semanas y semanas en recuperar la actividad normal".La nueva nube de Diputación, CPD es su nombre formal por si alguien quiere compararlo con el último ordenador que se haya comprado, ha costado 580.000 euros, en buena parte llegados de los fondos europeos Next Generation.Sustituye a un equipo anterior, del año 2007, y tiene números llamativos. Mientras entra en el pasillo de cables y servidores, tras entrar en la cámara con una clave secreta. Ahora Epicsa da cobertura a más cien aplicaciones y asistencia técnica a 80 portales web. Protege más de 3.000 equipos informáticos. Como ventaja añadida, necesita menos consumo eléctrico, sobre todo porque la refrigeración es inteligente, adaptada "ya no se utiliza aquello de congelar salas enteras, ahora el frío se concentra en zonas y momentos concretos".Como ejemplo, en agosto de 2024 los cacharros consumieron 50.434 kilowatios/hora. En noviembre de 2024, con el cambio, ya eran la mitad: 25.773. El descenso seguirá hasta ser un tercio del inicial, con el añadido de "una importante reducción de la huella de carbono".Bajo los pies de los que cantan goles (o no) cada 15 días en el estadio municipal del Cádiz Club de Fútbol descansa ahora uno de "los centros más avanzados de Andalucía que agiliza el servicio público que prestamos a la ciudadanía".