Decenas de locatarios y trabajadores de la Central de Abasto de la Ciudad de México (CEDA), el mercado mayorista más grande de América Latina, ha sido por años un foco de corrupción, extorsión y violencia.LEE ADEMÁS: Doble hoy No Circula: ¿Qué autos no circulan este jueves 27 de febrero en CDMX y EDOMEX?Señalan que, desde la administración de Marcelo Ebrard, cuando Raymundo Collins fue designado administrador, hasta la gestión de Miguel Ángel Mancera y su coordinador Julio César Serna Chávez, las prácticas corruptas se intensificaron y siguen siendo una constante.No obstante, indican que el periodo que más temor generó entre los comerciantes fue el de Raymundo Collins, marcado por secuestros, extorsiones y la infiltración de grupos criminales en la CEDA.“Aquí no hay día en que no nos cobren por todo. Si no es el derecho de piso, es por seguridad, es por cualquier pretexto. Desde la época de Collins hasta la de Marcela Villegas, hemos vivido bajo la amenaza de las mafias que operan con total impunidad“, señaló Jorge Pérez, comerciante de la Central de Abasto desde hace 25 años.Aseguran que durante la administración de Julio César Serna, veían cómo la venta de bodegas, la concesión de estacionamientos y los contratos de publicidad pasaban a manos de allegados del gobierno de Mancera.“No se podía trabajar sin pagarles a ellos, todo era negocio. Si querías vender, tenías que pagarles o te cerraban la bodega”, asevera María González, quien vende frutas y verduras desde hace tres décadas en la CEDA.Pero con la llegada de Marcela Villegas Silva, la corrupción continuó y tomó un giro más violento.“Lo que hizo Villegas fue meter grupos de choque apoyados por la policía. Lorenzo Chávez controlaba todo y si no pagabas, te destruían la mercancía o te golpeaban”, dice Felipe N., comerciante de abarrotes.Durante dos décadas, la Central de Abasto se convirtió en un territorio dominado por grupos criminales, con bandas organizadas cobrando derecho de piso y ejecutando secuestros exprés para presionar a los comerciantes.“Si querían mandar un mensaje, te levantaban o atacaban tu negocio“, señala Jorge N.En la CEDA hay un sinnúmero de negocios en manos de prestanombres, negocios que representan dos décadas de corrupción.Los comerciantes también denuncian que fueron utilizados como botín político y que en su momento se operó en contra de la actual jefa de gobierno, Clara Brugada.Por eso, ahora demandan a la exalcaldesa de Iztapalapa que no se repita la misma situación vivida ya por al menos dos décadas.“No queremos que se repita lo mismo, queremos que de verdad nos ayuden”, dice María González, por lo que afirmó que Clara “tiene que sacar a Chávez de la Central, porque él sigue moviendo todo desde las sombras. No queremos más de lo mismo. Queremos que Clara nos escuche, que limpie la Central de Abasto de una vez por todas“, exige Felipe Mendoza. The post Comerciantes de Central de Abasto exigen a Brugada acabar con la corrupción de décadas first appeared on Ovaciones.