Dice el filósofo Jacques Derrida que no habría deseo de archivo sin la posibilidad de un olvido. Un archivo son papeles, cartas, cachivaches. Un archivo es memoria, corazón, voces de tiempos pasados. Quien escucha esas voces puede conocer sus historias y contarlas. Así lo ha hecho la escritora y profesora universitaria Cristina Oñoro (Madrid, 45 años) en En el jardín de las americanas, un ensayo sobre las integrantes del Instituto Internacional y de la Residencia de Señoritas que recuerda los lazos de amistad que tejieron sus alumnas y profesoras —además de compartir edificios, el jardín y la biblioteca— y el empeño que las llevó a unirse: que las mujeres tuvieran la educación que soñaran y desearan.Seguir leyendo