Los sistemas ADAS están avanzado a mucha velocidad y cada vez incorporan más funciones de conducción automatizada, tanto para estacionar, como para circular en determinadas vías y condiciones. Estos sistemas necesitan de sensores que capten lo que sucede alrededor del coche y generen un reconocimiento fiable del entorno del vehículo, para que los sistemas puedan actuar en consecuencia. El número y variedad de sensores que equipan los automóviles está creciendo en paralelo al avance de sus funcionalidades de asistencia a la conducción y de conducción automatizada. El primer asistente de frenada autónoma de emergencia (AEB), lanzado por Volvo en 2008, empleaba un radar y una cámara para detectar obstáculos en la carretera, y aplicar los frenos automáticamente si el conductor no reaccionaba a tiempo para evitar una colisión. Hoy en día, los modelos más avanzados disponen de más de 30 sensores, que combinan diferentes tecnologías (LiDAR, radares de ondas milimétricas, sensores ultrasónicos, cámaras de alta resolución…). El único fabricante que no combina diferentes tecnologías de sensores es Tesla, cuyos sistemas de asistencia a la conducción se basan, exclusivamente, en la información aportada por las cámaras y sus algoritmos de IA. El «cerebro» del automóvil combina y procesa la información aportada por todos los sensores. Los automóviles con mayor número de sensores pueden llegar a procesar 8 GB de datos por segundo, el equivalente a descargar dos películas en 4K. Otra consecuencia del aumento del número de sensores es la necesidad de un incremento de la potencia de cálculo computacional de los vehículos y del uso de sofisticados algoritmos que buscan aligerar la carga del proceso. Los vehículos más avanzados disponen de una potencia de cálculo combinada de 1.016 TOPS (tera operaciones por segundo), con una batería de cuatro SoC (system on chip) de última generación funcionando en paralelo. Un coche completamente autónomo, como robotaxis y modelos que se encuentran actualmente en desarrollo, requieren de una potencia de cálculo de 3.048 TOPS. El tercer elemento clave de la ecuación es el uso de algoritmos de Inteligencia Artificial para el reconocimiento de los elementos presentes en el tráfico (vehículos, peatones, ciclistas, obstáculos, marcas viales, señalización…) y una rápida toma de decisiones. Con mucha información recibida por los sensores, una gran potencia de cálculo y el uso de IA, se logra un reconocimiento fiable y rápido del entorno, porque cada décima de segundo que pasa, un coche en movimiento avanza una distancia. Así, el coche con más sensores del mundo es el Avatr 11, que cuenta con 35 sensores: 3 sensores LiDAR, 13 cámaras de alta resolución, 6 radares de ondas milimétricas, 12 sensores ultrasónicos y 1 cámara de monitorización del conductor. En segundo lugar está el WM Motors M7, con 32 sensores. Esta berlina eléctrica fue el primer automóvil del mundo en equipar de 3 sensores LiDAR, que brindan una cobertura horizontal de 330 grados. Además, estos sensores pueden hacer zoom de forma autónoma, lo que permite un ajuste dinámico de la velocidad de fotogramas y la resolución, en función de diferentes escenarios de conducción. A estos sensores se suman 5 radares de onda milimétrica, 12 sensores ultrasónicos, siete cámaras de ocho megapíxeles, cuatro cámaras de visión envolvente y 1 cámara de monitorización del conductor. Y en tercer lugar, el IO ET9, también con 32 sensores. El sistema de conducción autónoma Aquila 2.0 de este modelo dispone de un total de 32 sensores: 1 sensor LiDAR de ultra largo alcance de alta resolución, 2 sensores LiDAR laterales de gran angular, 7 cámaras de alta resolución de 8 megapíxeles, 4 cámaras de 3 megapíxeles de visión envolvente, 5 radares de ondas milimétricas, 12 sensores ultrasónicos y 1 cámara de monitorización del conductor. Las funciones de cada sensor - Cámaras : La cámara principal de los sistemas ADAS está montadas en el parabrisas. Algunos modelos emplean más cámaras (hasta 14) para monitorizar todo el exterior y al conductor. Las cámaras tienen la ventaja de adaptarse a diferentes tareas, reconocer colores y tener un amplio rango de 50 a 500 metros, y de hasta 180 grados; y las desventajas de ofrecer problemas de visión en condiciones climatológicas adversas o cuando están sucias, y de estar sujetas a ilusiones ópticas naturales. La cámara puede reconocer, a través de algoritmos preprogramados y de segmentación semántica, la apariencia de categorías de objetos típicos como coches, motos, peatones, ciclistas, señales o marcas viales. Cuando se sustituye un parabrisas, hay que desmontar las cámaras del cristal roto y montarlos en el nuevo. Una vez instalados, estos sistemas han de ser recalibrados para asegurar que funcionan con la máxima precisión y proporcionan la información correcta a los sistemas de seguridad. Carglass se encarga de realizar el calibrado de cámaras con el uso de instrumentos de alta precisión en los talleres por parte de técnicos especialistas formados en la materia. - Sensor de radar . El radar sirve para localizar objetos estáticos y en movimiento. Funciona enviando ondas de radar, que rebotan en los objetos del entorno del vehículo. Midiendo la velocidad relativa y la distancia de los objetos con el efecto Doppler, se determina la velocidad relativa, distancia y posición de los objetos que se encuentran en los alrededores del vehículo. El radar tiene un alcance de 250 metros y un rango de 360 grados. Sus ventajas son su fiabilidad, que no le influyen las inclemencias meteorológicas y que mide todos los valores relevantes en uno (ángulo, distancia, velocidad, parámetros del material), sin necesidad de cálculos. En el lado adverso, no reconoce colores y ofrece un reconocimiento limitado de las formas. Suelen estar instalados bajo la parrilla y los paragolpes. - Sensores de ultrasonidos . Son muy fiables para el reconocimiento del entorno más cercano (de hasta seis metros) y a bajas velocidades. Funcionan con la técnica del sonar (como los murciélagos), enviando impulsos ultrasónicos que rebotan en los obstáculos y cuyos ecos son analizados para obtener información. Se emplean, sobre todo, para los asistentes de aparcamiento. Estos sensores van instalados en los paragolpes. - Sensores láser LiDAR . Es el único sensor que mide con precisión en 3D (distancia, posición y altura), con un alcance de alrededor de 200 metros. Sus desventajas son su elevado precio, un alcance reducido en condiciones de niebla, lluvia o cuando está sucio, y que no reconoce colores, aunque sí materiales.