El impresionante y mágico vídeo del Jerez de las últimas décadas del siglo XIX y principios del XX

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Como todo en esta vida, tiene sus pros y sus contras. El auge de la inteligencia artificial está transformando muchos sectores y destruyendo otros. La automatización de muchos procesos pone en peligro miles de empleos. La IA puede componer canciones en segundos o escribir libros en menos que canta un gallo. Puede hacer doblajes para cine y presentar programas de televisión, entre otras cosas. Sin una regulación sobre el uso ético y con la información por los suelos en muchas ocasiones por culpa de las fakes creados por IA, las preocupaciones sobre el uso y abuso de esta nueva tendencia son grandes. [Estamos también en WhatsApp, en Telegram y en Bluesky. Síguenos] Cierto es también que está la parte positiva, aquella que está sirviendo a sectores como la sanidad a optimizar resultados médicos y realizar operaciones con gran precisión. En ámbitos como la medicina personalizada o la ciberseguridad está aportando herramientas extras de lo más destacables. [articles:314990]En el capítulo de la creatividad, el debate es amplío. Ahora, una IA puede generar textos, códigos, imágenes y vídeos con una gran facilidad. Y, en muchas ocasiones, el resultado es impresionante. Hasta películas enteras se pueden hacer con inteligencia artificial. [articles:329344]En esta ocasión, es un vídeo el que, gracias a la inteligencia artificial, ha recreado el Jerez de las tres últimas décadas del siglo XIX y de las primeras del siglo pasado. La IA ha dado vida a imágenes del Jerez de entonces, viéndose a gente en movimiento con un resultado impresionante que, aunque ficticio, nos invita a viajar al pasado para imaginarnos cómo era la vida en la ciudad en aquellos tiempos. [articles:329262]En la publicación que se está compartiendo en redes se pueden ver cómo era hace más de un siglo la rotonda de los Casinos, la calle Consistorio, la plaza Plateros, la alameda Cristina, la plaza del Arenal, el Cabildo Viejo, las calles Larga, Ancha y Santa María, así como La Catedral, por entonces conocida como La Colegial.