El Departamento de Eficacia Gubernamental (DOGE), inspirado por el multimillonario Elon Musk, se construyó sobre lo que era antes el Servicio Digital de Estados Unidos (USDS). Mediante un decreto de Donald Trump, la agencia cambió de nombre, aunque sigue sin ser en sentido estricto un Departamento, y heredó su personal. Este martes más de 20 empleados federales que habían pasado a estar adscritos al DOGE han presentado su dimisión de forma conjunta alegando que se negaban a utilizar sus conocimientos técnicos para “desmantelar servicios públicos esenciales”.Seguir leyendo