La plaza de concejal en la oposición municipal de Cádiz, frente a la mayoría absoluta del Partido Popular, parece poco apetecible y cotizada. Nadie muestra demasiado interés por cubrir vacantes y las renuncias se encadenan hasta sumar tres.La primera dimisión, la originaria en esta situación, fue la de Lola Cazalilla, número tres en la última lista municipal de Adelante Izquierda Gaditana (AIG) y ex delegada de Fiestas en el gobierno local de José María González, Kichi.[Estamos también en WhatsApp, en Telegram y en Bluesky. Síguenos] La salida de Cazalilla, por motivos profesionales al acceder a un nuevo empleo fuera de la ciudad de Cádiz, debió provocar la inclusión automática en el pleno municipal de Laura Cubero, candidata número siete en la candidatura de AIG en las últimas elecciones, las de 2023.Esta militante de Izquierda Unida declaró de forma inmediata que no iba a ocupar ese lugar en el plenario local, sin que la formación aclarase los motivos. [articles:327767]De esa forma, el turno correspondía a Montemayor Mures, la que fuera delegada de Turismo y Comercio en el último equipo de gobierno liderado de Kichi, entre 2019 y 2023.Miembros del grupo municipal de AIG confirman a lavozdelsur.es que Mures tampoco quiere volver a ocupar el puesto vacante de concejala en la oposición.De esta forma, y según el mismo orden de candidatura, la opción pasa ahora a Vanesa Sibón que, si no renuncia también, será la nueva edil en ese grupo municipal en el próximo pleno.Tanto el portavoz municipal de AIG, David de la Cruz, como la ex concejala Lola Cazalilla han calificado estos movimientos como "normales" y hasta saludables porque en su formación "no hay políticos profesionales"."Nos dedicamos a la política de forma solidaria y nuestro compromiso con la actividad pública tiene unos momentos y un tiempo", resalta el portavoz para respaldar la decisión de todas las compañeras que han evitado ocupar la plaza vacante.