La fumata blanca entre las tres eléctricas propietarias de la central nuclear de Almaraz es inminente. Fuentes empresariales confirman a este medio que en la próxima reunión de la Sociedad Centrales Nucleares Almaraz-Trillo (CNAT), que se celebrará este mes, se aprobarán las inversiones necesarias en seguridad, combustible y personal para que la planta pueda funcionar tres años más allá del calendario acordado en 2019 entre compañías, Enresa y el Gobierno, que contemplaba la clausura de los dos grupos atómicos extremeños en 2027 y 2028. Seguir leyendo