Capitán América acaba de despertar del hielo… y ya está metido en una persecución en moto, una conspiración internacional y un inesperado duelo con el mismísimo Doctor Doom.Marvel no se anda con rodeos. El nuevo cómic Captain America #1, que se lanza el 2 de julio, arranca con todo: acción, política, secretos y un Steve Rogers completamente descolocado en un mundo que ya no se parece al que dejó atrás. Es una nueva etapa para el Capitán América, escrita por Chip Zdarsky (Daredevil) y dibujada por Valerio Schiti (Avengers), que promete dinamitar lo que creíamos saber sobre el Centinela de la Libertad.Una etapa de Capitán América apenas explorada… Hasta ahoraLa historia se sitúa en un momento muy concreto: justo después de que Steve Rogers fuera descongelado. Todavía no es parte de los Vengadores. Todavía no sabe ni cómo funcionan los móviles. El mundo cambió, y él apenas empieza a entenderlo.Y no se le da tiempo a respirar.Nada más abrir el cómic, vemos al Capitán América montado en una moto a toda velocidad, persiguiendo a un sospechoso con intenciones explosivas. La escena es pura adrenalina: escudos volando, disparos interceptados, maniobras milimétricas… Y mientras todo eso ocurre, un grupo de figuras en las sombras lo observa desde lejos. No son enemigos. Son analistas. Están tomando nota. ¿Puede este «hombre fuera de su tiempo» ser útil para el nuevo orden mundial?Marvel ComicsEl enemigo no lleva capa… Pero tiene nombreUno de los mayores aciertos del cómic es presentar al Capitán América que no está luchando contra alienígenas ni monstruos con tentáculos. El enemigo tiene nombre y apellidos: Victor Von Doom.Sí, Doctor Doom ya está aquí. Acaba de tomar el poder en Latveria y no ha lanzado ni una sola bomba. No lo necesita. Su poder no se basa en la destrucción, sino en la manipulación. Controla gobiernos. Influye en decisiones a puerta cerrada. Se cuela en los despachos antes que en los campos de batalla.La pregunta está servida: ¿Cómo se enfrenta un soldado como Steve Rogers a una amenaza que no se combate con puños?Entre la guerra sucia y los idealesChip Zdarsky lanza al Capitán América a un dilema moral de los gordos. ¿Debe adaptarse a las nuevas reglas del juego geopolítico, aunque sean turbias? ¿O se mantiene firme en sus principios, aunque eso lo deje fuera de juego?Lo interesante es que esta historia no se centra solo en el conflicto externo. También va de lo que pasa en la cabeza de Steve. La batalla entre lo que fue y lo que el mundo espera que sea. La eterna lucha entre idealismo y pragmatismo.El pasado que reescribe el futuroAunque el cómic está ambientado en el pasado, Zdarsky ya ha adelantado que lo que ocurra aquí tendrá un impacto directo en el presente del personaje. No es una historia nostálgica: es una nueva base para todo lo que está por venir.Y eso se nota en cada página. El dibujo de Valerio Schiti no se queda en lo espectacular (que lo es), sino que transmite tensión, velocidad, y sobre todo, contradicción. Steve se mueve como un súper soldado, pero piensa como un hombre lleno de dudas. Y esa mezcla lo hace más interesante que nunca.Además, el color de Frank Martin, con tonos metálicos y fríos, subraya ese contraste entre el pasado glorioso del Capitán América y el presente gris y turbio que le toca enfrentar.Marvel Comics¿Puede seguir siendo un símbolo?Uno de los grandes temas del cómic es muy claro: ¿puede Steve Rogers seguir siendo Capitán América en un mundo que ya no cree en los héroes? ¿Qué sentido tiene la moral de los años 40 cuando los enemigos ya no llevan brazaletes con esvásticas, sino que se presentan como legítimos ante la ONU?La serie Capitán América no da respuestas fáciles. Y eso es lo que la hace tan potente.El enemigo no es un monstruo. Es una idea. Es la desconfianza. Es el miedo. Y esa es una batalla mucho más difícil de ganar.Un punto de entrada perfecto (y con promesas de sacudidas fuertes)El número 1 de esta nueva serie funciona como una excelente puerta de entrada para cualquiera que quiera conocer al Capitán América más humano, más vulnerable y más decidido a entender su lugar en el mundo.La portada, obra de Ben Harvey, ya es una declaración de intenciones: Steve, en medio de una encrucijada, con el escudo firme pero la mirada perdida. No es solo un superhéroe. Es un hombre enfrentando su tiempo.Y con una figura como Doctor Doom moviendo los hilos desde las sombras, está claro que lo que viene no va a ser fácil.¿Qué podemos esperar?Todo apunta a que esta nueva etapa se va a convertir en un pilar importante para el futuro del universo Marvel. Las semillas que se plantan en este cómic están destinadas a florecer en historias futuras. Nuevos aliados, nuevas traiciones, y decisiones que podrían redibujar la figura del Capitán América como la conocíamos.Porque, al final, este no es solo un cómic de acción. Es una reflexión sobre el legado, sobre cómo se mantiene la integridad en tiempos de confusión, y sobre qué significa realmente ser un símbolo, cuando el mundo ya no cree en símbolos.Esta noticia ha sido publicada por Cinemascomics.com