Valencia ya tiene preparados los esbozos de las que serán sus fallas municipales de 2026. Dos propuestas que llevan por lema 'Hope' , en el caso de la falla grande, y 'Valencia es mou' , en el de la infantil. La Ciudad del Artista Fallero ha acogido este jueves la presentación oficial de los proyectos, que se plantan fuera de concurso. La falla infantil, obra de Mario Pérez -que se estrenará en marzo en la Plaza del Ayuntamiento- con diseño de Paco Camallonga, es una propuesta didáctica que combina diversos elementos que presentan a la ciudad como una Valencia moderna, avanzada y sostenible. «'Valencia es mou' habla de movimiento urbano y social y jugará precisamente con eso, con lo que mueve a la ciudadanía y de las movidas que hacen de ella una ciudad dinámica y divertida», explican desde Junta Central Fallera. En la parte posterior, se incluirá un juego visual que invitará al espectador a adivinar el nombre de las paradas de la red de Metrovalencia. En total estará compuesta por 40 ninots realizados con madera, cartón y poliestireno expandido de origen ecológico. En cuanto a la falla grande, por segundo año consecutivo será el tándem formado por Alejandro Santaeulalia y Vicente Llácer el que plante en la Plaza del Ayuntamiento, nuevamente con un diseño de José Santaeulalia. 'Hope' es «un canto a la esperanza y la resiliencia». La figura central será la icónica imagen de Charles Chaplin en su película '¡Armas al hombro!', un largometraje satírico sobre belicismo que ahora se convierte en falla para denunciar también todo lo que se está viviendo en el mundo. Con 27 metros de altura, «'Hope' nos habla de cómo se puede cambiar el mundo y transformar la oscuridad en alegría, color y paz. Un planteamiento estético moderno, de gran altura y que, de seguro, no dejará indiferente a nadie», señalan desde el organismo. En la parte posterior, varios niños y niñas se encuentran realizando actividades relacionadas con la cultura, la pintura, la lectura o la música «en una clara alusión a la esperanza en las nuevas generaciones, en la palabra y el diálogo». Dos proyectos que, en palabras del concejal de Fallas y presidente de Junta Central Fallera, Santiago Ballester, «rebosan creatividad, talento y sátira pero también nos lanzan mensajes que nos hacen reflexionar y darnos cuenta de que el arte fallero también es reflexivo, didáctico y necesario».