Este jueves se presentó en la biblioteca del Alcázar el libro 'Toledo mágico' (editado por Ledoria, con prólogo de Lorenzo Fernández Bueno y a la venta por 10 euros), el número dos de la Colección Crónicas del Misterio, donde Amparo Bertol Laguna, Luis Rodríguez Bausá, José García Cano y Juan Luis Alonso Oliva cuentan una historia distinta de la ciudad a la que suele aparecer en cualquier solemne guía turística. Y saben bien de lo que hablan pues, en efecto, a ello se dedican en cuerpo y alma en Rutas de Toledo . La empresa, además de ofrecer las tradicionales visitas a las catedral primada, propone un Toledo mágico, de tinieblas, fantasmas, subterráneo, de brujas, leyendas y templarios. « La del Toledo mágico es una de las rutas con más éxito. Atrae a mucha gente. Hemos puesto de moda el turismo del misterio », presumió Luis Rodríguez Bausá. Y cómo no se van a referir a ese mundo esotérico si «entre el tres y el cuarto por ciento de los fenómenos extraños ocurren aquí», añadió con ironía y citando el dato dado por un periódico nacional. «¿De qué hablamos cuando hablamos de mundo mágico?», se preguntó Rodríguez Bausá. Y él mismo se respondió, ya más serio: «No es sólo el columpio que se mueve o la huella de un niño en el Alcázar». En el libro, de 84 páginas y dividido en siete capítulos, hay uno dedicado al Grial y tiene un lugar destacado la Inquisición, que llegó a la ciudad en el año 1485 con «la tortura perfectamente avalada», recordó García Cano. O el Marqués de Villena, con fama de mago, o María de Cazalla, otra noble del siglo XVI, una mujer a la que «se miraba mal» por ser demasiado culta. Ese fue su pecado mortal. Colaboradores habituales del programa televisivo 'Cuarto Milenio', que dirige Íker Jiménez, en este libro desfilan nigromantes, alquimistas, astrólogos y hechiceros en escenarios como la cueva de Hércules, la de San Gil o la Casa del Duende. Como colofón final se reseñan 100 puntos de encuentro con lo mágico.