Las cuentas de la Unión de Hermandades de Jerez siguen generando controversia. Pese a que el presidente defendió públicamente su validez y recibió el respaldo del pleno, un grupo de hermanos mayores ha alzado la voz asegurando que las cifras aprobadas están plagadas de irregularidades graves que podrían incluso derivar en consecuencias penales.“Ni las cuentas estaban bien ni el Obispado dice que lo estén”, ha afirmado tajante un hermano mayor a lavozdelsur.es, señalando que incluso desde el Obispado se preguntan cómo se han podido aprobar los balances con el contenido del informe emitido.Un informe “demoledor” y se apunta a posible fraude fiscalSegún esta fuente, el citado informe desvela elementos especialmente preocupantes, como la inexistencia de continuidad contable entre ejercicios o que las cifras “no recogen una imagen fiel de la realidad financiera”, lo que pone en duda toda la gestión.[articles:337578]Este núcleo de hermanos mayores críticos no duda en calificar la situación como de “posible fraude fiscal”, denunciando pagos en efectivo de facturas superiores a mil euros sin factura y transacciones opacas destinadas, según aseguran, a eludir obligaciones tributarias.“El informe es demoledor. Para salir corriendo”, sentencian. Y recuerdan que la Unión de Hermandades maneja una cifra cercana a los 600.000 euros anuales, lo que multiplica por mucho el volumen de recursos que gestionan individualmente las cofradías.Advertencias de consecuencias legalesAunque el grupo llegó a redactar un documento firmado por 23 hermanos mayores, finalmente optaron por no presentarlo formalmente. Aun así, lamentan que el pleno haya validado las cuentas “cuando la realidad y la auditoría obligaban a no aprobarlas”.También denuncian posibles “irregularidades de carácter penal” también en los números de la Magna por el pago de “elevada cantidad que el presidente dijo que se abonó con cheque, pero fue en efectivo”. Según explican, cuando se pidieron comprobantes, “era mentira”.El hermano mayor que ejerce como portavoz del grupo afirma con rotundidad: “Los hermanos mayores no saben el problema en que se han metido aprobando unas cuentas con un informe destructor del Obispado”. Sobre la Magna, detalla que la votación resultó en 13 noes, 12 en blanco y 23 síes, y asegura que ha revisado las cifras durante horas: “El pago en efectivo ha sido tremendo y con cantidades importantes. No es legal”.“El presidente ha mentido. Las cuentas no están bien”, insiste. Y anticipa que esto no ha terminado. De hecho, varios hermanos mayores ya han presentado cartas en el Obispado desvinculándose de la aprobación de las cuentas para evitar repercusiones.Para este grupo, ahora “la pelota está en el tejado de la Casa de la Iglesia”, desde donde —según dicen— tomarán medidas. Por último, también piden explicaciones por gastos de 4.000 euros en bares y restaurantes con una tarjeta usada por el presidente durante la Magna, que el Consejo justifica como “atenciones a colaboradores”.“Es vergonzoso. En cuatro meses se ha gastado en bares lo mismo que hemos recibido las cofradías”, critican. No descartan que alguien eleve el caso a los tribunales civiles o que incluso intervenga Hacienda ante los posibles indicios de fraude.