Decenas de miles de israelíes se echaron a las calles de Tel Aviv y Jerusalén para pedir al gobierno que acepte el alto el fuego y los rehenes puedan volver a casa. Las protestas arrancaron al tiempo que el Gabinete de Seguridad realizaba una reunión para analizar la contestación positiva de Hamás a la propuesta de tregua de dos meses, una reunión clave para establecer la estrategia israelí antes del viaje de Benjamín Netanyahu a la Casa Blanca , previsto para mañana, lunes. Donald Trump quiere un alto el fuego y, sobre todo, quiere ser la persona que dé la noticia al mundo. Antes, deberán resolver con Hamás los cambios propuestos al texto de la tregua referidos a la entrega... Ver Más