Se suele decir que el teléfono es una extensión de nosotros, pero, en ocasiones, me da la impresión de que sea justo al revés. Cuando estamos en sociedad esto se hace más evidente: miramos continuamente la pantalla del móvil en restaurantes, caminando por la calle, en el transporte público e incluso en el gimnasio. Nos disociamos totalmente de lo que nos rodea.Pero incluso en casa basta con prestar un poco de atención a nuestras rutinas para darnos cuenta de que a veces tenemos un comportamiento casi robótico, a cualquier hora, durante el día pero también por la noche. Y es algo que me preocupa.No digo ni mucho menos que la solución no es volver a la época de las cabinas telefónicas, al igual que tampoco tendría sentido renunciar al mechero y volver a chocar piedras con nuestras manos. Pero sí ser conscientes de esos pequeños gestos casi involuntarios que hacemos desde que nos levantamos para tratar de volver a ser un poco más “humanos”.Desaprendiendo los hábitos que he adoptado cada mañanaLo que me ha resultado más eficaz ha sido dejar el teléfono fuera del dormitorio. Al tenerlo en la mesita de noche y utilizarlo como despertador, es casi inevitable que, después de apagar la alarma, mi primer impulso no sea revisar todas esas notificaciones que se han colado en mi teléfono durante la noche. En Xataka Móvil Que la luz azul del móvil nos produce insomnio va a acabar siendo un mito: un estudio le resta importancia y añade un posible causante Cuando te acuestas pronto, como es mi caso, se acumula mucha información nocturna en el smartphone. Intento ser lo más productiva posible desde el primer momento del día, porque es cuando noto que rindo mejor.Revisar las notificaciones nada más despertarme me hacía un doble efecto: perder concentración y aumentar el ruido mental procedente de estímulos externos. Quiero volver a tomarme el café sin que Fulanito o Menganito ya hayan interferido en mis emociones matutinas a los pocos segundos de haber abierto los ojos. Esperar un rato para mirar el móvil es de las mejores decisiones que he tomado. Otro de los gestos involuntarios que me he dado cuenta que tenía es que abría aplicaciones sin motivo. La “memoria muscular” de nuestro cerebro está acostumbrada después de tantos años a buscar contenido en nuestro smartphone incluso aunque no lo tengamos a la vista. He configurado bien las notificaciones para saber que voy a recibir aquello que me interesa, de manera que no me perderé nada realmente importante.La trampa del scroll infinito es algo que me ha costado menos quitarme. Nunca he llegado a ser una persona con un consumo elevado de Reels o vídeos de TikTok, pero sí que reconozco que desayunaba viendo redes sociales. Ahora, mi pareja y yo hemos adoptado la técnica de Jeff Bezos y tomamos ese primer café charlando en lugar de estar cada uno absortos con nuestro móvil.Y, por supuesto, nada de teléfonos en el baño. No entiendo en qué momento normalizamos esto, pero que tire la primera piedra quien nunca lo haya hecho.No quieras hacerlo todo el primer díaA priori, pueden parecer cosas bastante sencillas y que giran en torno a no usar el móvil nada más despertarnos, tampoco utilizarlo comiendo o en el baño, controlar el tiempo que pasamos haciendo scroll sin atender a nada en concreto o los desbloqueos de pantalla y apertura de apps que son gestos prácticamente involuntarios.Si tienes muy automatizado el uso del móvil desde primera hora de la mañana, esto te puede costar mucho más de lo que parece. Y aquí, casi parafraseando a Theodore Roosevelt (a quién se le atribuye eso de “un día a la vez”) te doy un consejo simple que aplica a este y otros casos similares: desaprende un hábito a la vez.Ponte pequeñas metas, como dejar de hacer una de estas cosas cada día o incluso cada semana, hasta que finalmente hayas logrado cambiar tu rutina.No se trata de dejar de usar el móvil, pero sí de usarlo de un modo en el que no se nos olvide que la máquina es él y los humanos somos nosotros.En Xataka Móvil | Que la luz azul del móvil nos produce insomnio va a acabar siendo un mito: un estudio le resta importancia y añade un posible causanteEn Xataka Móvil | Everyday: una aplicación con genial diseño para ayudarte a seguir los hábitos diarios (function() { window._JS_MODULES = window._JS_MODULES || {}; var headElement = document.getElementsByTagName('head')[0]; if (_JS_MODULES.instagram) { var instagramScript = document.createElement('script'); instagramScript.src = 'https://platform.instagram.com/en_US/embeds.js'; instagramScript.async = true; instagramScript.defer = true; headElement.appendChild(instagramScript); } })(); - La noticia Me di cuenta que el móvil me estaba haciendo ser menos humana, así que he cambiado mi forma de utilizarlo por las mañanas fue publicada originalmente en Xataka Móvil por Noelia Hontoria .