El Govern ha solicitado al juzgado la suspensión cautelar de la sentencia que le obliga a tener bloqueado un concurso de traslado interno y que tiene a unas 2.000 personas, entre funcionarios y opositores, pendientes de destino desde hace casi un año. Fuentes consultadas de la conselleria de Presidència explican a este medio que han cambiado de estrategia y han solicitado medidas para poder desencallar la asignación del grueso de plazas mientras esperan a la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC). Desde el departamento liderado por Albert Dalmau reconocen que la justicia puede tardar hasta dos meses en pronunciarse sobre si acepta o no la cautelar que le reclaman y que, como pronto, hasta entonces no podrán desencallar el proceso.Seguir leyendo....