El futbolista Antony se marcha del Real Betis. Es Antonio de Triana, y tras apenas unos meses, tras la cesión firmada en el pasado mercado de invierno, vuelve al equipo propietario de sus derechos, el Manchester United.Pero el brasileño se ha querido despedir con un emotivo vídeo, una carta de amor al Betis y al beticismo.Un futbolista con apenas un paso fugaz pero que ha quedado, dice, "enamorado" del club. Ya se le vio cuando venció al Sevilla FC y lo celebró por todo lo alto. Y esta misma semana, cuando rompía a llorar tras perder la final de la Conference League.Lo cierto es que hacía falta un milagro para que el United aceptara otra cesión al Real Betis, o que se sentase a negociar unos términos que fueran asequibles por los verdiblancos, que si bien no está en su peor momento económico, tampoco tiene capacidad más que para ir al día y mirando mucho sus inversiones, apurando además los últimos años con las inscripciones, si bien dentro de los límites. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Antony Santos (@antony00)Antony no está hoy en el mercado al que puede acceder el Real Betis. Porque costó un centenar de millones al United y porque, paradójicamente, su buena segunda parte de la temporada en España ha hacer que vuelva a recuperar valor. Su éxito aquí le manda lejos del Villamarín.En este vídeo, en portugués, Antony explica que "hoy es el día de agradecer": "Necesito decir por qué fuisteis y siempre seréis tan especiales para mí".Antony recuerda que "desde pequeño, el fútbol no era solo un sueño o mi única oportunidad de cambiar de vida, como muchos dicen por ahí. Para mí era más que eso, era mi alegría". "La vida me llevó lejos, de la favela al mundo. Salí de Brasil, jugué en Holanda, jugué en Inglaterra. Dejé de ser solo un niño y me transformé en padre. Mucho ha cambiado, pero el fútbol siempre está ahí. Siempre ha sido mi fortaleza segura. Hasta que un día todo se rompió, del cielo al infierno".Eso fue lo que le ocurrió en Manchester. "La bola dejó de entrar, la alegría se fue, mi mundo se oscureció y comencé a dudar de mí mismo. De mi talento y de mi pasión por el fútbol. Fue entonces que el fútbol me dio un último regalo".Y eso llegó cuando fue cedido al Betis: "Cuando llegué aquí no sabía lo que esperar, pero ni en mis mejores sueños imaginé encontrar lo que encontré". Ya desde que llegó sintió esa conexión espceial. "Era como volver a casa, como reencontrar un pedazo de mí que pensaba que había perdido. Con ustedes volví a sonreír. Con ustedes encontré al niño aquel que amaba el fútbol con todo el corazón. Con ustedes el fútbol volvió a ser amor. El amor verdadero. Gracias por abrirme las puertas como uno de ustedes"."Gracias por devolverme la alegría de jugar fútbol. Y gracias por recordarme por qué me enamoré del fútbol. Mi casa, mi gente. Mucho Betis Siempre".La única posibilidad a futuro ahora es que Antony, dentro de dos años, cuando acabe su vinculación con el United, quede libre y pueda fichar gratis por el Betis. Es lo que hizo Héctor Bellerín, que llegó a pasar por el FC Barcelona antes de volver a Sevilla.