La figura más destacada del santoral del 7 de junio es la beata Ana de San Bartolomé, carmelita descalza, mística y discípula cercana de Santa Teresa de Jesús. Nacida como Ana García Manzanas en Almendral de la Cañada (Toledo), ingresó al convento de San José de Ávila en 1570 tras recuperarse milagrosamente de una grave enfermedad, atribuyendo su sanación a la intercesión de San Bartolomé, de quien tomó el nombre religioso.Sor Ana fue secretaria y enfermera de Santa Teresa, y tras la muerte de esta, lideró la expansión del Carmelo descalzo en Francia y los Países Bajos. Fundó conventos en París y Amberes, donde fue conocida como la “Libertadora de Amberes” por su labor espiritual y social en tiempos de conflicto religioso. Falleció en 1626 y fue beatificada por el Papa Benedicto XV en 1917.Otros santos y beatosSan Isaac de Córdoba (†851). Monje y mártir español del siglo IX. De familia noble, abandonó su cargo como tesorero en la administración musulmana para ingresar al monasterio de Tábanos. Fue decapitado por defender públicamente la fe cristiana durante la persecución en Al-Ándalus.San Antonio María Gianelli (1789–1846). Obispo de Bobbio y fundador de la Congregación de las Hijas de María Santísima del Huerto. Dedicó su vida al servicio de los pobres y la educación de la juventud en Italia. Fue canonizado por el Papa Pío XII en 1951.San Colmán de Dromore (s. VI). Obispo y abad irlandés, fundador del monasterio de Dromore en el condado de Down. Conocido por su labor evangelizadora y su amistad con San Patricio, es venerado como uno de los primeros promotores del cristianismo en Irlanda.San Roberto de Newminster (†1159). Monje benedictino inglés que se unió a la reforma cisterciense. Fundó el monasterio de Newminster en Northumberland, Inglaterra, y es recordado por su vida de oración y austeridad.