Hay un Willem Dafoe para cada espectador. Para la mayoría es el actor que ha protagonizado taquillazos como Platoon, Arde Mississipi o La última tentación de Cristo. Hay quien lo identifica con el supervillano Norman Osborn en la saga Spider-Man. Otros lo relacionan con el cine de autor de David Lynch, Lars von Trier, Sean Baker o Yorgos Lanthimos. Algunos incluso se habrán cruzado con su avatar en el videojuego Beyond: dos almas. Pero no tantos saben que fue cofundador de una de las compañías más influyentes del teatro experimental estadounidense, The Wooster Group, nacida en la efervescente escena neoyorquina de los setenta y todavía activa. Además ha trabajado con directores tan destacados como Romeo Castellucci o Bob Wilson. En España se le vio en 2012 en una impactante producción operística en el Teatro Real, Vida y muerte de Marina Abramovic, creada por Wilson y Abramovic, con música de Antony y William Basinski. Seguir leyendo