El Ayuntamiento de Córdoba va a encargar un estudio para analizar si el número de licencias de taxi , la forma en que se realizan los descansos de los conductores, los horarios de prestación del servicio o la ubicación de las paradas actualmente es suficiente para soportar la creciente demanda de usuarios que tiene una ciudad que sigue aumentando en el número de turistas que recibe cada año, que ha crecido en población para rozar de nuevo los 325.000 habitantes en la capital, que ha aumentado su territorio de forma exponencial en los últimos años con la aparición de nuevos barrios y que tiene una temporada alta que se ha expandido también al otoño. El d elegado de Movilidad del Ayuntamiento de Córdoba, Bernardo Jordano , avanza a ABC que su delegación tiene previsto licitar próximamente este estudio para determinar qué decisiones tienen que tomar respecto al taxi, ya que su opinión es que «los servicios públicos» de la capital, entre los que se encuentra el sector de los taxistas, «se tienen que adaptar a los cambios que experimenta la ciudad». Jordano aclara además que la realización de este estudio para el Ayuntamiento analizará el estado del coeficiente de licencias que tiene Córdoba en proporción a sus habitantes, entre otros aspectos, «es una obligación de la ordenanza municipal», aclara. El edil destaca que «pese a que la ordenanza obliga a hacerlo, hasta ahora no se ha hecho, y no sé por qué», pero dejó patente que «nosotros vamos a hacerlo» próximamente. Córdoba tiene actualmente 509 licencias de taxis. Esta situación se ha perpetuado desde que se dieron las últimas autorizaciones para operar en la ciudad (unas nueve) en el año 2017. Han pasado ocho años desde entonces y la cifra no se ha modificado pese al crecimiento en muchos aspectos de la ciudad: población, extensión, turistas y eventos culturales y deportivos. El coeficiente actual es que en la capital hay 1,55 licencias por cada mil habitantes, apunta Jordano, mientras «en una ciudad de tamaño similar como Bilbao hay 2,10». El estudio analizará si es necesario ampliarlas o no. El presidente de Autacor, José Antonio Coca , la principal asociación de autónomos del taxis en Córdoba, defiende, en declaraciones a ABC, que «no hacen falta más licencias», ya que el número actual «es suficiente». Lo sustenta en sus datos: «La media de espera de un viajero es de cuatro minutos». Eso sí, admite que, en épocas de alta de demanda del servicio (Feria, Semana Santa, eventos), «hay momentos puntuales» que puede llegar «a 20 minutos». No es la única limitación que se encuentra un usuario cuando quiere acceder a un taxi. El presidente de Facua Córdoba, Francisco Martínez Claus, pone el foco en otro problema «que es un caso muy particular que se da en Córdoba y no sucede en el resto de España». Es la limitación horaria que tiene cada licencia para circular en la ciudad. Mientras lo habitual en el país es que el vehículo pueda estar disponible las 24 horas, en nuestra capital «se limitó a sólo 18 horas». Esta medida está operativa de lunes a jueves. Los coches pueden estar activos las 24 horas de viernes a domingo. Para Facua la reducción horaria de 18 horas «carece de fundamentos, ya que hasta la fecha y después de 13 años, todavía no se ha aportado ningún estudio técnico, como ha venido solicitando esta asociación de consumidores, que verifique y detalle, la eficiencia de la medida impuesta». El presidente de los taxistas justifica esta medida en dos argumentos. Uno, «un autónomo, como somos nosotros, no puede estar más de 12 horas en un coche a diario». Dos, la necesidad de que la actividad «tiene que ser rentable, y quizás no lo sería si algún compañero tiene que contratar a otro conductor» para tener disponible la licencia «24 horas». Jordano intermedia que, para conocer realmente si es necesario modificar esta norma —que se implantó en el anterior mandato del PP con José Antonio Nieto en la Alcaldía—, se va encargar próximamente el estudio que marca la ordenanza, ya que «a lo mejor nos dice que las licencias son suficientes con otro tipo de reparto de horarios y/o descansos», puesto que lo que buscará el Ayuntamiento es «la eficiencia del servicio público» en la balanza de que sea rentable para los taxistas y accesible para los usuarios, entre los que se han multiplicado la quejas en los últimos meses. Entre las mejoras, expone que «hay que trabajar con Inteligencia Artificial con las paradas» para detectar los momentos de mayor necesidad. Precisamente, el delegado introduce otra cuestión a debate. La regulación de los descansos de los taxistas, que puede interferir en una prestación adecuada del servicio. Martínez Claus, por parte de los consumidores, resalta que el régimen «de descansos a los que están sujetos los taxis y los servicios pactados como Aseguradoras, Renfe, Mutua y demás», a su juicio, «hace imposible saber si realmente se garantiza una correcta regulación de la Prestación del Servicio del Taxi en la ciudad de Córdoba», pero añade tajante que «lo que sí se sabe es que esto está provocando una falta de vehículos en una ciudad de más de 300.000 habitantes». Coca explica los motivos de estas medidas. «El precio medio de la carrera en Córdoba es de 6,20 euros» y que el «80% de los casos es el taxista el que espera» al viajero. A su juicio, tampoco es necesario tocar la limitación horaria o los descansos, puesto que si se deja de regular y limitar horarios y descansos «habrá menos personas que quieran vivir del taxi, por tanto, habrá menos taxistas, menos taxis y, en definitiva, un peor servicio para los usuarios». Recuerda que el sector es duro por sí, ya que «cuando la gente se lo está pasando bien, nosotros estamos trabajando». Ahora hay 58 paradas de taxi en la ciudad. Son 55 fijas más tres que pivotan por horarios y eventos: Axerquía, plaza de toros y calle Góngora (noche). Aquí todas las partes (instituciones, sector y viajeros) coinciden en que son suficientes. Los matices vienen después. En primer lugar, Jordano, sobre estas novedades de atender los eventos, destaca que «es el camino» para adaptarse a los nuevos tiempos. Mientras, los consumidores, en voz de Facua, estiman que «es suficiente», pero lamentan, y aquí vienen los matices extendidos entre los ciudadanos, que «el problema es que en muchas de ellas, nunca o casi nunca hay vehículos», afirma Claus. Coca defiende a su sector. «No puede haber un vehículo esperando a cada viajero» porque eso limitaría la rentabilidad y operatividad del servicio, e insiste en que la media de espera es de «cuatro minutos» fuera de picos puntuales. Además, el presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, Juan Andrés de Gracia , secunda que el taxi debe seguir siendo un servicio público, pero que demanda que «es necesario ampliar el límite urbano en el que aplican las tarifas del taxi», a la vez que solicita «un sistema más claro de los precios para los barrios de la periferia» de la ciudad. Sobre este asunto, Coca apunta que «los límites del casco urbano los marca la normativa y no los taxistas» como justificación. La otra gran pregunta es por qué las VTC no operan en Córdoba si es que existe la posibilidad de que el servicio público se haya quedado muy estrecho para una ciudad de 325.000 habitantes. Córdoba es la duodécima capital de España en población. Todas las que están por encima, e incluso alguna por abajo, tienen compañías de VTC operando (Uber, Cabify o Bolt): Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga, La Coruña, Alicante, Bilbao, Granada, Mallorca, Marbella, Murcia, Oviedo, Santander, Tenerife y Zaragoza. Uber dio servicios en la ciudad durante algo menos de dos años, entre octubre de 2018 y no volvieron tras el parón, en principio puntual, de la pandemia del Covid. Fueron 75 licencias. Hubo un factor diferencial para que el negocio tuviera dificultad para ser rentable: no podían entrar a hacer servicios al Casco Histórico (necesitaban una autorización 48 horas para cada uno, realmente), amén de que tampoco pueden parar en paradas de tren, aeropuertos y puertos (esto se sigue dando en toda España). Ahora hay un factor que podría incentivar su regreso. Desde la entrada en vigor de la Zona de Baja Emisiones en la ciudad (que incluye el Casco), cualquier vehículo con etiqueta ECO (cero emisiones) puede entrar al Centro Histórico. La mayoría de los turismos de las VTC cumple este requisito, por lo que actualmente está limitación de pedir autorización para acceder al Casco ya no les afectaría. Pueden entrar libremente. Jordano reconoce que ha habido reuniones con alguna asociación que agrupa a las VTC en Andalucía «y que no conocían esta circunstancia», por lo que concluye que «si no están en Córdoba es por una cuestión de mera competencia, no ven rentabilidad». El presidente de Anauto, José Manuel Berzal, que representa al sector de las VTC en España, explica a este periódico que «nosotros colaboramos habitualmente con las administraciones» para comprobar las necesidades de movilidad de las ciudades, y que están «dispuestos» a dialogar con el Ayuntamiento para buscar «cómo adecuar las necesidades del sector» y los usuarios aquí. El presidente de los taxistas en Córdoba defiende que no es necesaria la llegada de las VTC a la ciudad para mejorar el servicio al usuario —aclara, además, que alguna privada ya trabaja aquí y que las que no están son las multinacionales—. A su juicio, «nosotros tenemos unas normas, como las tarifas reguladas, y ellos no tienen normas; así no se puede competir en el mismo terreno de juego». Recuerda que «si no hay VTC» tipo Uber, Cabify o Bolt es «porque las VTC no lo han visto rentable; no les interesa». Para él, su llegada supondría «un incremento del precio para los usuarios». El delegado de Movilidad recuerda que «en la misma línea que nos estamos planteando dos o tres líneas nuevas en Aucorsa », como las circulares, también es necesario el estudio que obliga la ordenanza para comprobar qué es necesario «adaptar» del servicio público del taxi de acuerdo «a los cambios que experimenta la ciudad». Coca concluye que no se cierra a debatir cualquier cuestión con el Ayuntamiento p porque «igual que la sociedad avanza», el sector «tiene que avanzar» desde el diálogo, pero defiende que «el servicio del taxi en la ciudad es muy bueno ». Como último ejemplo cita las mejoras que han realizado para incorporar la app de reservas (PideTaxi) y el canal de WhatsApp que acompaña a la llamada telefónica.