La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA) han convocado para este viernes una huelga nacional de facultativos en protesta contra el borrador del nuevo Estatuto Marco que elabora el Ministerio de Sanidad. La protesta busca reclamar un texto propio para la profesión y supone la segunda jornada de paros en esta línea, tras la celebrada en junio.Ambas organizaciones sostienen desde hace meses que el colectivo médico necesita un marco normativo diferenciado que recoja sus particularidades dentro del Sistema Nacional de Salud. En distintas reuniones, han trasladado al Ministerio la petición de un Estatuto propio, mientras que Sanidad ha defendido que la norma debe aplicarse a todos los profesionales del sector sanitario.La legislación vigente data de 2003 y su revisión se negocia desde hace dos años. Durante este periodo, el Ministerio ha presentado varios borradores. Los sindicatos consideran que el último supone un retroceso respecto a versiones previas y que apenas corrige los problemas que ya presentaba la normativa anterior.La convocatoria de huelga forma parte de un calendario de movilizaciones que las organizaciones médicas anunciaron en verano. Entre las acciones previstas se incluye la presentación de una propuesta de Estatuto Médico que ya ha sido remitida a Sanidad y que también se está defendiendo ante los grupos parlamentarios. Este texto recoge medidas como la voluntariedad de las guardias, la jornada de 35 horas semanales y la creación de una clasificación profesional específica, el grupo A1+.Una protesta frente al CongresoA la protesta se ha sumado la Agrupación Profesional por un Estatuto Médico y Facultativo (APEMYF), que a través del Sindicato de Médicos y Facultativos de Madrid (SIME) ha convocado una manifestación en la capital. La marcha comenzará frente al Congreso de los Diputados y concluirá en la sede del Ministerio de Sanidad.Desde SIME se ha reclamado además que el Servicio Madrileño de Salud adopte medidas propias, al margen del proceso estatal, con el fin de mejorar las condiciones de ejercicio de la medicina en la región. Entre las reivindicaciones figuran mejoras en las jornadas y descansos, con la reducción progresiva de las guardias hasta un máximo de 12 horas consecutivas y su cómputo en la jubilación.Los sindicatos han planteado también la necesidad de financiar la formación, docencia e investigación, así como de regular la sobrecarga en Atención Primaria y hospitales. Entre las demandas figuran el impulso de la movilidad voluntaria permanente y la garantía del abono íntegro de las pagas extra. Consideran que un Estatuto propio es la vía para reconocer la singularidad de la profesión y asegurar condiciones adecuadas en la sanidad pública.