Este es el proyecto coliderado por la UCA finalista de uno de los galardones más prestigioso de la arqueología

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El proyecto Arqueomallornauta, centrado en el estudio de un barco hundido frente a la costa de Palma de Mallorca, ha sido seleccionado entre los seis finalistas del IV Premio Nacional de Arqueología y Paleontología, otorgado por la Fundación Palarq, uno de los reconocimientos más importantes en el ámbito científico y patrimonial de España. Esta iniciativa, en la que participa la Universidad de Cádiz (UCA) junto con la Universitat de Barcelona, la Universitat de les Illes Balears y el Consell de Mallorca, destaca por ser el único proyecto de arqueología clásica incluido en esta edición, reforzando así su relevancia en el panorama actual de la investigación histórica.Desde su inicio en 2021, y con una duración prevista hasta 2028, Arqueomallornauta se ha centrado en el análisis del pecio Ses Fontanelles, datado en el siglo IV d.C. El barco, excepcionalmente conservado, transportaba más de 320 ánforas con productos como aceite, vino y garum, procedentes de la región de Cartagena, según indican los investigadores. El estudio del naufragio permite reconstruir rutas comerciales en el Mediterráneo occidental durante la Antigüedad Tardía, un periodo clave en la transformación económica y cultural del Imperio Romano.Inscripciones cristianas y un tesoro arqueológico bajo el marUno de los aspectos más relevantes del hallazgo es la presencia de casi 100 tituli picti, inscripciones pintadas sobre las ánforas que representan el conjunto más numeroso jamás documentado en un solo pecio. Además, se han localizado tapones con simbología cristiana, un elemento que, según el equipo investigador, abre nuevas vías de estudio sobre el papel de la Iglesia en las redes comerciales tardoantiguas. Estas evidencias materiales permiten explorar no solo la economía, sino también la evolución ideológica y religiosa de la época.Una imagen de parte del equipo científico que trabaja en el proyecto.La participación de la UCA se articula a través de su Área de Arqueología del Departamento de Historia, Geografía y Filosofía, y del Instituto Universitario de Investigación Marina (INMAR). El grupo está liderado por el catedrático Darío Bernal Casasola, e incluye también a expertos del Departamento de Ciencia de los Materiales e Ingeniería Metalúrgica y Química Inorgánica. La implicación multidisciplinar del equipo ha sido fundamental para abordar este yacimiento con una metodología pionera.El proyecto combina técnicas arqueológicas tradicionales con herramientas de última generación, como modelado 3D, análisis químicos, arqueometría y estrategias de conservación subacuática. Además de su dimensión científica, Arqueomallornauta apuesta por la divulgación y la formación, con el objetivo de acercar los hallazgos tanto a la comunidad investigadora como al conjunto de la sociedad.La Fundación Palarq reconoce con este galardón, dotado con 80.000 euros, aquellos proyectos que “contribuyen de manera significativa a ampliar el conocimiento sobre las sociedades y ecosistemas del pasado”. El jurado ha valorado la calidad científica, la innovación metodológica y la proyección social de las propuestas finalistas. Según expresó Antonio Gallardo Ballart, presidente de la Fundación, el objetivo del premio es “reconocer no solo la excelencia científica, sino también la capacidad de los proyectos para generar un impacto real en la sociedad y tender puentes entre la ciencia y la ciudadanía”.El fallo del jurado se hará público el próximo 21 de noviembre a las 18:00 horas, en una ceremonia oficial en el Museo Arqueológico Nacional (MAN) de Madrid. Al acto asistirán representantes institucionales, figuras del ámbito científico y personalidades del mundo cultural. Para el equipo de la Universidad de Cádiz, la nominación representa un reconocimiento al esfuerzo colectivo y al modelo de colaboración interinstitucional como clave para alcanzar la excelencia en investigación arqueológica.