Este viernes 15 de agosto dará comienzo la Feria de Agosto de Málaga, una de las citas más importantes del verano andaluz, que finalizará el siguiente sábado 23. Esta edición llega a la capital con novedades con respecto al polémico derecho de admisión, es decir, la facultad que tiene un lugar -en este caso las casetas tanto del Real como del centro- para permitir o denegar la entrada de personas bajo condiciones legales, como la edad o la vestimenta.La nueva ordenanza, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Málaga (BOP) el pasado mes de mayo, incluye novedades que han sorprendido entre los residentes, concretamente por este derecho de admisión previamente comentado, el cual se ve modificado. Ahora, las casetas pueden prohibir la entrada a las personas que lleven ropa inadecuada, siempre que esta restricción figure en su solicitud de autorización y esté expuesta en la entrada.Ni ropa deportiva, ni de playaLa indumentaria viene especificada en el BOP, siendo las prendas prohibidas la indumentaria de playa, como bañadores o chanclas. Tampoco se podría acceder con vestimenta deportiva: pantalón corto de deporte o zapatillas deportivas. La medida se aplicará tanto en el Real de la Feria como en las casetas del Centro, y el incumplimiento podría derivar en la expulsión del recinto. Los organizadores recomiendan optar por ropa de calle o trajes típicos para evitar problemas en el acceso.[articles:339795]Un cambio drásticoSorprende el cambio, dado que en 2023 uno de los reportes más polémicos provocó el cierre de una de las casetas durante 24 horas, y el hecho denunciado fue que denegaron entrar a un hombre por llevar pantalón corto. Aquella sanción generó debate sobre los límites del derecho de admisión, y ahora, con la nueva normativa, ese mismo motivo se convierte en una razón válida para impedir el acceso, siempre que esté correctamente anunciada.Prohibido beber en la calleOtras de las medidas que también han dado de qué hablar entre los malagueños es la prohibición de beber en la calle, algo que, hasta ahora, se hacía con total normalidad durante la semana de feria. En Málaga era habitual que en el Centro Histórico los asistentes compraran bebidas en bares, tiendas o supermercados y las consumieran en la calle durante la feria de día, pero ahora solo lo podrán hacer en terrazas autorizadas o recintos habilitados para ello.El objetivo, según fuentes municipales, es unificar criterios y garantizar una imagen más cuidada del evento, manteniendo al mismo tiempo un ambiente acorde a la tradición festiva.