Un tratamiento experimental en gatos con peritonitis vírica ha dado un giro inesperado a la investigación sobre la covid persistente, ofreciendo claves para entender cómo se comporta el sistema inmunitario tras una infección grave por coronavirus en humanos.Investigadores han logrado frenar los efectos de una enfermedad felina causada por un coronavirusUn tratamiento experimental desarrollado para gatos podría tener implicaciones directas en la salud humana. Unos investigadores de la Universidad de California en Davis han logrado frenar los efectos de una enfermedad felina causada por un coronavirus, y lo más relevante es que el mecanismo descubierto podría ofrecer respuestas clave para tratar la covid persistente en personas.El estudio se centró en combatir la peritonitis infecciosa felina (PIF), una patología grave que afecta a aproximadamente un 2% de los gatos, especialmente a los más jóvenes o que viven en refugios. Aunque el virus que la causa es exclusivo del mundo felino, pertenece a la misma familia de coronavirus que el SARS-CoV-2. Ambas infecciones pueden desencadenar una inflamación prolongada y una disfunción inmunitaria que se mantiene incluso tras eliminar el virus del organismo.Una enfermedad animal que imita a la covidLos paralelismos entre la PIF y la covid persistente llaman la atención. En los gatos, el coronavirus comienza afectando el sistema digestivo, pero en ciertos casos muta y se disemina por todo el cuerpo, atacando el sistema inmunológico y generando inflamación crónica, fiebre y fallos multiorgánicos. En los humanos, la covid persistente también se caracteriza por síntomas prolongados y alteraciones inmunológicas que pueden durar meses.A NEW mode of treatment for #LongCovid & severe Covid-19!Severe SARS-CoV-2 infection is marked by systemic inflammation, T-cell exhaustion, lymphopenia, and chronic immune dysfunction, with limited therapeutic options for recovery. Feline infectious peritonitis (FIP), a pic.twitter.com/08KHLNinD0— Vipin M. Vashishtha (@vipintukur) July 15, 2025El equipo científico, liderado por el investigador Amir Kol, observó que incluso tras tratar la PIF con antivirales eficaces como el GS-441524, algunos gatos continuaban presentando signos de actividad inmunitaria residual. El sistema inmune, aunque ya no combatía al virus, seguía actuando como si la amenaza persistiera, algo similar a lo que ocurre en casos de covid prolongada.Combinar antivirales con células madrePara solucionar este problema, los investigadores desarrollaron una estrategia terapéutica combinada: un tratamiento con antivirales, reforzado con células madre mesenquimales (MSC), extraídas de tejidos como la médula ósea. Estas células tienen propiedades inmunorreguladoras y regenerativas, lo que las convierte en candidatas ideales para ayudar al organismo a recuperar su equilibrio.Los investigadores han desarrollado una estrategia terapéutica con antivirales para tratar la enfermedadEl estudio, publicado en la revista STEM CELLS Translational Medicine, demostró que los gatos que recibieron la combinación de tratamiento antiviral más células madre mostraron una recuperación inmunológica más completa. Se redujo la hiperactividad de células T y B, responsables de mantener la inflamación, y aumentaron las células T reguladoras, que modulan la respuesta inmunitaria y previenen daños a largo plazo.Además, los científicos observaron una mejora en la capacidad del sistema inmunitario para formar células de memoria, lo que podría traducirse en una mejor respuesta ante futuras infecciones.Un paso adelante hacia terapias humanasAunque la terapia se ha probado solo en gatos, su valor trasciende el ámbito veterinario. “Estamos viendo cómo la medicina en animales puede ofrecer modelos muy útiles para entender enfermedades humanas complejas como la covid prolongada”, explica Kol. “Los gatos no solo se están beneficiando de este tratamiento, sino que están ayudando a sentar las bases de futuros enfoques clínicos para personas afectadas por el coronavirus”, añade.Artículo relacionadoUna nueva variante del Covid se extiende por el mundo: ¿qué se sabe de NB.1.8.1 y por qué preocupa a la OMS?El hallazgo refuerza el papel de la medicina comparada, que utiliza modelos animales para investigar condiciones humanas. En este caso, los científicos han podido observar en tiempo real cómo un sistema inmunitario recuperado puede estabilizarse y evitar daños posteriores, algo clave en pacientes con síntomas persistentes de covid, como fatiga extrema, confusión mental o dificultad respiratoria.Esperanza para tratar la covid persistenteLos expertos subrayan que aún queda mucho por investigar, pero este avance muestra que entender cómo los coronavirus afectan a otros mamíferos puede dar pistas esenciales sobre el comportamiento del sistema inmunológico humano. Además, confirma que terapias celulares como las basadas en MSC pueden tener un papel fundamental en la recuperación postviral, más allá del simple control de la infección.El hallazgo podría beneficiar a millones de personas en todo el mundo que aún luchan contra las secuelas de la pandemiaLo que comenzó como un esfuerzo por salvar a gatos enfermos podría terminar beneficiando a millones de personas en todo el mundo que aún luchan contra las secuelas de la pandemia. Referencia de la noticia Amir Kol et al. ( 2025 ). MSC Therapy Improves Immune Recovery in a Feline Model of Severe Coronavirus Infection. STEM CELLS Translational Medicine.