Al fin tendrá coche!, grita un niño con los brazos en alto en el barrio de Rocafonda, tras conocer la noticia: Lamine Yamal cumple 18 años. A mí me gustaría tenerlos ya, dice otro, alegre, en la pista que engendró el fútbol del atacante azulgrana. Desde las primeras horas de la mañana, un grupo de críos corretea por el campo. Regatean, chutan y disfrutan con el balón. Tan solo el traqueteo de una perforadora en obras silencia sus carcajadas. Les molestamos un poco con este ruido, pero bueno, apunta uno de los operarios en la calle.Seguir leyendo....