Fueron 14 meses deshojando la margarita para decidir si apostaba por cotizar este año. "No tenemos ninguna necesidad de salir a bolsa si el entorno macroeconómico y geopolítico no acompaña", aseguró Joaquim Agut (Terrassa, 1954) en las jornadas empresariales que organizó Prensa Ibérica en octubre del año pasado en Sant Fruitós de Bages (Bages, Barcelona). Fueron sus últimas declaraciones públicas antes de esta semana, cuando el presidente ejecutivo de Cirsa tocó la campana en la sede que tiene la bolsa en el paseo de Gràcia de la capital catalana. Blackstone, una de las principales gestoras de fondos de inversión estadounidense, sacó el 20% de la empresa de juego de Terrassa a un precio de 15 euros la acción. La valoración: 2.520 millones. Su objetivo: ir reduciendo progresivamente la participación de su capital en los próximos años con nuevas ventas en el mercado. La empresa, confiesa Agut, nunca se planteó cotizar en otro lugar que no fuera España. "Somos de aquí", responde.Seguir leyendo....