Un equipo de inspectores de la OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) ha regresado a Irán tras la guerra de 12 días contra Israel en junio. Teherán había suspendido la cooperación con el organismo por no haber concenado los bombardeos israelíes y estadounidenses contra sus instalaciones. Esta visita coincide con que Irán ha reanudado este martes en Ginebra las negociaciones con Francia, Reino Unido y Alemania sobre su programa nuclear, en una nueva ronda de diálogos que busca evitar que estas potencias europeas restablezcan sus sanciones contra Teherán , anunció la televisión estatal iraní. «Ahora, el primer equipo de inspectores del OIEA regresó a Irán y estamos a punto de reiniciar las actividades», ha dicho el director Rafael Grossi en una entrevista emitida el martes en el programa 'The Story' de la cadena estadounidense Fox News. «En lo que respecta a Irán, como usted sabe, hay muchas instalaciones. Algunas fueron atacadas, otras no», afirmó el argentino. «Así que estamos discutiendo qué tipo de (...) modalidades prácticas se pueden implementar para facilitar la reanudación de nuestro trabajo allí », completó. El anuncio se produjo mientras Irán mantenía conversaciones con Reino Unido, Francia y Alemania en Ginebra el martes. En ellas Teherán ha tratado de evitar el restablecimiento de las sanciones que las potencias europeas han amenazado con imponer en virtud de un acuerdo nuclear de 2015 que se encuentra en punto muerto. El viceministro de Relaciones Exteriores de Irán, Kazem Qaribabadi, que asistió a las conversaciones, dijo que era «hora» de que el trío europeo «tomara la decisión correcta y diera tiempo y espacio a la diplomacia». La reunión del martes fue la segunda ronda de diálogo con diplomáticos europeos desde el final de la guerra de junio, que se desencadenó por un ataque sorpresa israelí sin precedentes. El conflicto descarriló las negociaciones nucleares de Irán con Estados Unidos. También enfrió las relaciones de Teherán con el OIEA, ya que culpó en parte a la agencia de la ONU por los ataques a sus plantas nucleares. Israel afirma que lanzó los ataques para impedir que Irán desarrollara un arma atómica, una ambición que Teherán ha negado repetidamente.