La OTAN estima que España ha llegado al 2% de su gasto del PIB en defensa

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La Alianza Atlántica calcula que todos los países de la organización llegan ya al 2% comprometido en 2014, mientras que el año pasado a estas alturas solo llegaban a esta cifra 19 de los 32 sociosRalf Stegner: “Aumentar el gasto en defensa no acabará con las guerras y hará que nos falten recursos" España está destinando al gasto militar el 2% de su producto interior bruto durante 2025, según una estimación publicada por la OTAN, lo que mantiene al país entre los aliados que menos proporción de su PIB destina a este área, pero supone que España cumple por primera vez con el objetivo de gasto que los miembros de la Organización acordaron en 2014 para la década posterior. En la comparación interanual, según cifras de la Alianza, España ha aumentado su gasto en defensa en un 43,11%, de 22.693 millones de euros en 2024 a 33.123 millones en este curso. Comparativa del porcentaje del PIB destinado a Defensa entre 2014 y 2025. En un comunicado, la OTAN señala que se trata de cifras recopiladas hasta el 3 de junio de este año y estima que todos sus países miembros cumplen ya con el objetivo de gasto del 2% acordado en la cumbre de Gales en 2014 de cara a la década posterior, hasta 2024. El año pasado, sólo 19 de los 31 llegaban a este hito, según datos de la Alianza. Junto a España en el 2% se sitúan Bélgica, República Checa, Luxemburgo y Portugal, mientras que otra decena de países registran porcentajes de gasto en defensa entre el 2 y el 2,1% de su PIB. Bajo la presión combinada del presidente estadounidense, Donald Trump, y el esfuerzo ruso de guerra en Ucrania, los países de la OTAN acordaron en junio de este año un incremento radical de su gasto militar hasta el 5% de su PIB de aquí a 2035. La cifra del 5% es la suma de dos tipos de gasto: el grueso (3,5%) corresponde a gasto militar estricto, como compras de armas, el pago de los salarios y pensiones de las Fuerzas Armadas, misiones y maniobras o investigación. Además, los países deberán gastar un 1,5 % adicional de su PIB en seguridad en un sentido más amplio, como por ejemplo infraestructuras. España, no obstante, alega que con el 2% puede llegar a los objetivos de defensa que plantea la OTAN.