El expresidente colombiano Álvaro Uribe Vélez ha dedicado sus primeras horas de libertad a hacer campaña política contra el Gobierno de Gustavo Petro. El exmandatario permaneció por casi dos semanas en su finca El Capricho, en Rionegro, Antioquia, después de que la jueza Sandra Heredia le ordenara ejecutar de inmediato la pena de 12 años sin libertad a la que lo sentenció en primera instancia, al encontrarlo responsable de los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal. Sin embargo, en la tarde de este martes, el Tribunal Superior de Bogotá le concedió la libertad inmediata al fallar una tutela de su defensa. Seguir leyendo