¿Y si te digo que pronto los árboles podrían avisarnos de un incendio antes de que siquiera veamos oímos humo? Suena a cuento, pero ya hay sensores que “huelen” gases como monóxido de carbono, compuestos orgánicos volátiles y hasta hidrógeno, detectando un incendio incluso en sus primeras chispas.Y todo eso forma parte del Internet de los bosques, una red de dispositivos conectados que cuidan la naturaleza.¿Qué es eso de “Internet de los bosques”?En esencia, imagínate sensores diminutos dispersos entre los árboles, escuchando el aire. No esperan a que el humo espeso avise a las cámaras: miden señales químicas antes de que todo se convierta en fuego real. Así, el sistema envía alertas ultra tempranas a bomberos o guardas forestales para actuar rápido.Así lo explica Dryad Networks con su Silvanet Wildfire Sensor: un sensor solar equipado con IA que detecta incendios en minutos, no cuando ya arde todo, sino casi un “¡ey, aquí algo anda mal!” Y hay más: sensores BME690 que miden gases como monóxido de carbono y hidrógeno, clave en fases incipientes del fuego, y que forman parte de una red IoT pensada para frenar el cambio climático. ¿Cómo “huelen” el fuego antes de que se vea?En EE. UU., el Oregon Hazards Lab ha desplegado sensores capaces de detectar compuestos orgánicos volátiles (COVs), dióxido de carbono, monóxido y otros gases que se elevan en el aire antes del humo denso Esto es vital porque, cuando ya hay humo, muchas veces el incendio ya creció sin control.Además, el DHS (Departamento de Seguridad Nacional estadounidense) ha probado sensores que hasta son mil veces más sensibles que una alarma de humo doméstica. Lo que significa detección ultra temprana, aunque requiere IA potente para evitar falsas alarmas En España, proyectos como SenForFire de AEMET y CSIC están desplegando minisensores en lugares como Las Médulas (León) para probar su eficacia en distintas condiciones. Es parte de una red colaborativa entre varios países y universidades del suroeste europeo. ¿Qué aporta este Internet forestal?Detección antes del humo: no esperas señales visibles. Se actúa cuando aún hay opcionalidad.Alertas más rápidas y precisas: desde sensores a imágenes o drones, pero todo conectado y sincronizado en tiempo real.Redes IoT robustas en zonas remotas, a veces incluso vía satélite, evitando zonas sin cobertura móvil Imagínate paseando por el bosque un día sin percibir nada raro, y el móvil vibra: “Alerta: posible fuego cerca, se está detectando CO inusual”. Avanzas 100 metros, te encuentras llamas pequeñas. Sueltas una exclamación: “¡Menos mal que estamos temprano!” — y te das cuenta de que ese sensor pequeño, casi invisible, evitó una catástrofe real.¿Qué pienso yo?Pues que este enfoque me flipa. Es como darle superpoderes al bosque para que nos avise antes de que aparezca el desastre. Tiene sentido, especialmente con el cambio climático haciendo que los incendios sean más frecuentes y potentes. Si ampliamos esto, sería una revolución en la prevención forestal.Ahora, el reto será mantener esos sensores funcionando sin fallos, con cobertura real en zonas difíciles y evitando alarmas falsas. Pero si lo logramos, estamos ante una herramienta decisiva para salvar ecosistemas.La noticia El Internet de los bosques: detectando incendios antes de que haya humo fue publicada originalmente en Wwwhatsnew.com por Juan Diego Polo.