España vive horas críticas frente a una oleada de incendios forestales que arrasan miles de hectáreas, obligan a evacuaciones masivas y mantienen en vilo a comunidades enteras. Galicia, Castilla y León y Extremadura concentran los fuegos más preocupantes.En Galicia y Castilla y León se mantienen varios fuegos activos que causan preocupaciónEspaña continúa batalla contra incendios forestales en múltiples frentes. En el norte, especialmente en Galicia y Castilla y León, se mantienen varios fuegos activos que causan preocupación. La costa gallega, Asturias y zonas montañosas del interior registran emergencias graves, con una superficie arrasada que supera ya el medio millón de hectáreas este verano.En Galicia, el fuego de Chandrexa de Queixa ha sido uno de los más persistentes, tras llevar diecisiete días activo ha sido finalmente estabilizado después de afectar más de 19.000 hectáreas. En Lugo, la Xunta ha activado el nivel 2 de emergencia por un nuevo incendio en A Pobra do Brollón, que ya ha quemado más de veinte hectáreas y ha obligado a cortar la línea ferroviaria, siendo sustituido por servicio por carretera para mantener la conexión.Evacúan nuevas zonasLa gravedad de la situación ha obligado a evacuar o confinar a residentes de varias poblaciones vulnerables. En León y Zamora, cientos de vecinos han sido desalojados o confinados por la cercanía del fuego, mientras en Galicia se han adoptado medidas preventivas en núcleos como Golmar, San Pedro y Conceado.Ya nos encontramos en nuestro lugar de pernocta tras haber actuado en el #IFPorto #Zamora. La quema que se nos asignó en nuestro sector fue anclada con éxito. Mañana más y mejor.Os dejamos algunas imágenes de nuestro trabajo de hoy y del equipazo que tenemos. #BuenasNoches. pic.twitter.com/PUDMy3PWkB BRIF La Iglesuela (@brif_iglesuela) August 25, 2025En la comarca de La Carballeda, el incendio de Molezuelas de la Carballeda ha calcinado más de 37.000 hectáreas, y ha cruzado fronteras provinciales. En Palencia, el fuego que comenzó en Canalejas ha provocado la evacuación de más de 500 personas y el confinamiento de Guardo, donde incluso se suspendió el servicio de tren y carretera ante el avance incesante del fuego. En Extremadura, en Jarilla, más de 700 personas fueron evacuadas y desplazadas a refugios temporales, tras un incendio que ha superado las 16.000 hectáreas y requirió de ayuda internacional para su contención.Complicadas condiciones meteorológicasEl combate contra el fuego se realiza en un contexto de condiciones atmosféricas muy adversas: altas temperaturas, viento y baja humedad lo han complicado todo. Eso sí, en principio las condiciones serán más favorables en estos próximos días. En respuesta, se han desplegado medios terrestres, aéreos y personal de emergencia como bomberos, militares y brigadas forestales en toda la geografía.Las altas temperaturas, el viento y la baja humedad complican las labores de extinciónPor su parte, el Consejo de Ministros ha aprobado declarar como zona de emergencia las áreas afectadas, lo que permitirá activar ayudas económicas y apoyar la reconstrucción, con un plan que incluirá préstamos subvencionados y subvenciones públicas para las personas y las infraestructuras dañadas. Además, se ha anunciado la creación de una comisión interministerial para enfrentar la emergencia climática con un pacto de Estado coordinado.Movilización solidaria y respuestas desde el territorioDiversos gobiernos autonómicos han complementado estas medidas con apoyos directos. Asturias ha movilizado ayudas económicas para ganaderos, mientras que se han recibido refuerzos intercomunitarios: desde Gran Canaria se remitieron técnicos de bomberos hasta Castilla y León, y en Extremadura se coordinaron esfuerzos con Portugal, Francia y otros países vecinos.Artículo relacionadoUnos físicos gallegos en Nature: la velocidad de propagación y la energía de los incendios se están disparando en EspañaLa sociedad civil también ha respondido con movilizaciones en Galicia. Cientos de personas se han manifestado en Vigo y otras localidades, reclamando una mejor gestión forestal y criticando la lentitud de las respuestas institucionales. Bajo el lema “Lumes Nunca Máis”, los ciudadanos han expresado su frustración por la situación repetitiva de los incendios en los bosques gallegos.