Tal día como hoy hace veinte años se estrenaba uno de los anuncios más bonitos y relajantes que recuerdo, el de los miles de pelotas saltarinas bajando por las cuestas de San Francisco al ritmo de Heartbeats de José González. Era un anuncio para los televisores LCD Sony Bravia, aunque la verdad es que no sé cuánta gente se quedó con el detalle.Rodado originalmente para el mercado británico su éxito de público –y de premios– fue tal que al final terminó siendo emitido en muchos más. Y también llevó a Sony a intentar repetir su éxito con otros anuncios similares, pero igual que el slogan de los Bravia es «colour like no other», un color como ningún otro, el de las pelotas saltarinas tuvo un éxito como ninguno otro de la serie.Lo dirigió el sueco Nicolai Fuglsig. Y una peculiaridad es que está hecho todo en cámara, sin necesidad de efectos especiales. Eso sí, lo de la rana, la repisa con un perro, los buzones, los cubos de basura y los arbustos por los que pasaran las pelotas sí fueron preparados de antemano.Aunque sí hubo necesidad de 250.000 pelotas saltarinas Superball de Wham-O, lo que dejó buena parte del mercado estadounidense prácticamente sin existencias durante semanas. Son pelotas muy saltarinas: si las dejas caer de una altura de 20 metros saltarán hasta casi los 18 y medio.Fuglsig y su equipo llegaron a diseñar una especie de cañones para lanzarlas, aunque sólo les permitieron utilizarlos en los primeros días del rodaje. Eso les obligó a pasar al plan B, que era llenar contenedores de basura, levantarlos unos 20 metros, e inclinarlos para dejar caer las bolas sobre unas planchas de contrachapado y que así cogieran impulso.Utilizaron seis cámaras para rodar el anuncio, una de ellas de cámara lenta, y todas ellas colocadas dentro de sendas carcasas protectoras hechas madera contrachapada. Los miembros del equipo llevaban armaduras de Kevlar, cascos y escudos antidisturbios.En la parte inferior de las colinas redes de las que se utilizan para parar las pelotas de golf en los campos de prácticas se encargaron de frenar las pelotas saltarinas. También se taparon las alcantarillas para que las pelotas no se fueran por ellas.En Sony Commercial hay una colección de fotos del rodaje.Conseguir los permisos para cerrar varios barrios de la ciudad tampoco fue trivial, y yo diría de hecho que fue casi milagroso, ya que no sólo hubo que contar con el ayuntamiento sino con las personas que vivían en ellos. Pero el resultado fue desde luego espectacular. Aunque luego se pasaran semanas y semanas recogiendo pelotas saltarinas por San Francisco adelante. O más bien por San Francisco abajo.Y en 2006 Sony superó a Sharp para convertirse en la marca líder en ventas de televisores LCD.(Algunos detalles vía SFGate).# Enlace Permanente