La sonda Voyager 1 llega al lugar más recóndito del espacio. Y encuentra un muro de fuego donde termina el Sol y empieza el universo

Wait 5 sec.

Casi medio siglo después de su lanzamiento, la nave más lejana jamás construida por el ser humano sigue enviando señales desde más allá del sistema solar. A 24.000 millones de kilómetros de casa, ha descubierto una frontera invisible y ardiente que redefine los límites de nuestra comprensión cósmica.