La guerra entre Shein y el Gobierno francés continúa. Después de que el Senado aprobara el pasado junio una normativa que prohibíbe la publicidad de este tipo de negocios de 'fast fashion' (moda rápida), ahora el gigante asiático se enfrenta a una nueva polémica tras comercializar unas "muñecas sexuales" que, según el Ejecutivo, "fomentan la pornografía infantil".Seguir leyendo....