Descubierto por el telescopio TESS de la NASA, el sistema TOI-2267 —a solo 72 años luz— alberga tres planetas que orbitan dos soles distintos. Lo que parecía un mito de la ciencia ficción es ahora un fenómeno confirmado: los mundos de doble amanecer existen, y están cambiando nuestra idea de cómo el universo construye planetas.