Electronic Arts anunció que sería adquirida por un grupo de inversores, entre ellos el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí, algo que está causando preocupación.Hace unas semanas se confirmó que un grupo de tres fondos de inversión (PIF, el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí, Silver Lake y Affinity Partners) tenían intención de comprar Electronic Arts por 55.000 millones de dólares. El movimiento está encontrando opositores en políticos y desarrolladores por distintos motivos.Elizabeth Warren y Richard Blumenthal han criticado de manera pública su "profunda preocupación" por la "influencia extranjera y riesgos en la seguridad nacional" de esta venta, en especial por la presencia de PIF.El mensaje enviado a Scott Bessent (Secretario del Tesoro de los Estados Unidos) habla de los riesgos de la adquisición y piden un análisis de esta privatización "sin precedentes" de una compañía de tecnología y entretenimiento por al menos un inversor extranjero."El deseo de Arabia Saudí de comprar influencia a través de la adquisición de EA es evidente en la transacción: los inversores proponen pagar más de 10.000 millones de dólares por encima del valor comercial de EA, una empresa cuyas acciones se han 'estancado durante media década' en una industria impredeciblemente volátil", dice el comunicado.El texto también habla del posible problema de la privacidad de los millones de jugadores de títulos de Electronic Arts (principalmente deportivos y shooter), una información acumulada durante muchos años.Los empleados temen por sus puestos de trabajoLos empleados de EA y Communication Workers of America (CWA) critican la operación por otro tema: la amenaza de despidos, que suelen llegar tras la adquisición: "EA no es una compañía con problemas" y señalan sus beneficios anuales que colocan a la editora como una de las más grandes del mundo."El éxito de EA se debe por completo a las decenas de miles de empleados cuya creatividad, habilidad e innovación hacen que merezca la pena comprar a EA. Pese a esto, quienes nos veremos perjudicados como resultado de este acuerdo, no tuvimos representación en las negociaciones de compra". Esta asociación pide que la Federal Trade Commission estudie el acuerdo para proteger los puestos de trabajo en Electronic Arts.Es posible que la operación se encuentre más problemas de los previstos inicialmente, algo que podría alargar la venta durante años, como sucedió con la de Activision Blizzard por parte de Microsoft, o incluso impedir que finalmente se cierre el acuerdo.