Algunas personas sienten al acostarse una necesidad incontrolable de mover las piernas, pasando a librar una lucha constante contra una sensación incómoda que les impide conciliar el sueño. ¿A qué se debe? Aunque muchas personas lo ignoran o confunden con una simple efecto de nerviosismo, ansiedad o estrés, se trata de un trastorno real conocido como síndrome de piernas inquietas (SPI) o, según su denominación médica, enfermedad de Willis-Ekbom.Síntomas y causasEl SPI es un trastorno neurológico que se traduce en la fuerte necesidad de mover las piernas, especialmente por la tarde o la noche, cuando estás sentado o recostado, debido a una sensación de incomodidad en las extremidades inferiores. En ocaciones los síntomas desaparecen durante un tiempo y luego vuelven a reparecer.Puede leer: Activistas lanzan pintura roja a un cuadro de Cristóbal Colón en un museo de MadridEstas molestias, que suelen describirse como hormigueo, picazón, dolor, ardor o palpitación interna, suele aliviarse de forma temporal a causa del movimiento. Sin embargo, al regresar a un estado de quietud, reaparecen, dificultando el sueño. La falta de descanso deriva en cansancio, irritabilidad, dificultades para concentrarse y malestar físico y emocional, lo que interfiere en las actividades diarias y afecta a la calidad de vida.Este trastorno puede empezar a cualquier edad, incluso durante la niñez, y tiende a empeorar a medida que pasan los años, siendo más común en mujeres, sugieren desde Clínica Mayo.Aunque no se conoce la causa exacta que lo provoca, los expertos sugieren que puede estar relacionado con deficiencia de hierro o dopamina, un embarazo, enfermedades renales, efectos de algunos medicamentos o antecedentes familiares.Prevención y tratamientoEl tratamiento puede variar según la intensidad de los síntomas. Algunas medidas sencillas de autocuidado y cambios en el estilo de vida pueden ayudar a aliviar los síntomas, como mantener un horario para acostarse y despertarse todos los días, usar almohadillas térmicas en las piernas antes de acostarse, tomar un baño tibio, realizar actividades físicas durante el día, evitar estimulantes como la cafeína y el alcohol, no utilizar dispositivos electrónicos antes de acostarse o no comer en exceso a altas horas de la noche.En casos más severos, los médicos pueden recomendar medicamentos o suplementos que ayudan a regular la actividad neurológica.Fuente: RT ActualidadSigue las noticias de Falcón, Venezuela y el Mundo en www.notifalcon.com síguenos en Instagram y X @notifalcon y en Facebook: https://www.facebook.com/diarionotifalcon2/