Para la mayor parte del público, Peugeot es una marca automovilística. Y, por supuesto, lo es: una de las más antiguas del sector aún en activo. Pero si le preguntas a un chef, probablemente lo primero que le venga a la cabeza sea su molinillo. Y es que, aunque no todo el mundo lo sepa, Peugeot tiene un reputado lado gourmet cuyas raíces llegan hasta 1810, año en que la familia transformó un molino hidráulico en el Doubs francés en un taller metalúrgico.Seguir leyendo....