La vuelta al culto de la Macarena, tras la restauración realizada durante los últimos cuatro meses por Pedro Manzano, ha registrado una asistencia masiva durante los tres días en que la dolorosa estuvo expuesta en el presbiterio de la basílica. En total, más de 30.000 personas, entre hermanos y devotos, acudieron al templo para venerarla . Desde las seis de la mañana del día de la Inmaculada hasta el cierre en la noche del 10 de diciembre, numerosos fieles pasaron frente a la imagen, mostrando su devoción y admiración para dar las gracias. Sin duda, se trata de unas cifras masivas, incluso superiores a las del besamanos de la Macarena cada diciembre , alcanzando el máximo de asistencia el día de la Inmaculada, al ser festivo, con más de 17.300 devotos que acudieron durante las 18 horas en que permaneció abierto el templo. En diciembre de 2024, durante el besamanos de la Macarena, se registró la visita de más de 60.400 personas a lo largo de los cinco días , con una media de 12.000 asistentes por jornada. Por otra parte, en los tres días previos al besamanos, cuando la imagen permaneció en el presbiterio con motivo de la concesión de la Rosa de Oro por el Papa Francisco, la asistencia fue de 6.500 personas. La restauración de la Macarena generó gran expectación tras la fallida intervención de Arquillo. La espera, que se prolongó desde el pasado verano hasta diciembre, finalizó con el reencuentro con la imagen, que recupera su máximo esplendor y luce más bella que nunca , según han declarado las miles de personas que se acercaron a venerarla durante las tres jornadas. En la primera de ellas, ya desde la medianoche había personas aguardando la apertura del templo, formando colas que superaban el Hotel Macarena y con esperas de hasta cinco o seis horas para poder contemplar a la imagen. Eso sí, en esta ocasión se permitió permanecer más tiempo delante de la Virgen de la Esperanza, lo que hizo que la espera avanzara más lentamente de lo habitual. La Macarena recibió miles de flores en forma de ofrenda durante los tres días . Las celebraciones contaron con los sones del Carmen de Salteras y la Centuria Romana Macarena, acompañados de vivas de los devotos, saetas y canciones dedicadas a la imagen. Entre los asistentes se encontraban el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses, así como numerosas personas destacadas del mundo cofrade. A todo ello hay que unirle a la repercusión dada en los medios de comunicación de la hermandad, en Macarena Televisión, en la que participaron más de 100.000 espectadores, a lo que hay que unirle los impactos provocados en la prensa escrita, digital, radio y televisiones, llegando a rincones prácticamente de todo el mundo. Ahora llega el momento de la normalidad, con la toma de posesión de la nueva junta de gobierno, encabezada por Fernando Fernández Cabezuelo, y la preparación del besamanos de la Macarena, que se llevará a cabo del 18 al 21 de diciembre en la parroquia de San Gil, con motivo de la conmemoración del primer siglo de este culto.