La escaladora vallisoletana Iziar Martínez, una de las promesas del deporte castellano y leonés, recibió anoche el galardón de bronce en la primera edición de los Premios Princesa Girona a los Jóvenes Deportistas en una gala celebrada en el Auditorio Josep Irla de Girona, que contó con la presencia del presidente de la Generalitat, Salvador Illa y el presidente de la Fundación Princesa Girona, Francisco Belil, entre otras autoridades. El galardón reconoce el compromiso de la joven nacida en el municipio de Simancas con la sostenibilidad. Al recibir el galardón de manos de Carlos Prieto, delegado del Gobierno de España en Catalunya. Iziar destacó que en la práctica del deporte «es vital no solo el respeto a la naturaleza, sino el respeto hacia nosotros mismos y a nuestra salud». En la categoría femenina, el galardón de oro fue otorgado a la gimnasta Inés Bergua, reconocida por su excelencia deportiva, su liderazgo humano y su compromiso social, «cualidades que ha sabido compaginar con una destacada trayectoria académica». La plata recayó en la skater Julia Benedetti, quien señaló que «la pasión es el valor que más me define, es lo que hace que siga disfrutando del deporte aunque haya veces que los resultados no reflejen el esfuerzo». La ceremonia de la primera edición del Galardón Princesa de Girona a los Valores de Jóvenes Deportistas puso en valor la importancia del deporte como motor de crecimiento personal, inclusión y transformación social. Durante la velada, miembros del jurado dialogaron con la entidad ganadora y con los finalistas, conversaciones que sirvieron para mostrar no solo los logros deportivos de los finalistas, sino también su dimensión humana, sus principios y su compromiso con la sociedad. En este contexto, Iziar Martínez, expuso al periodista deportivo y director del diario Sport, Joan Vehils, su compromiso con la educación ambiental. O La ceremonia comenzó con la entrega del galardón en la categoría de entidad por parte de Salvador Tasqué, director general de la Fundación Princesa de Girona, a la Asociación Autismo Melilla, premiada por su labor en la inclusión de personas con TEA a través del deporte y su compromiso con la igualdad de oportunidades. Su presidente, Nicolás Fernández, explicó que «este reconocimiento visibiliza el trabajo de muchas familias y profesionales. El deporte no solo ha fortalecido la motricidad y la autonomía de nuestros chicos, sino que les ha permitido sentirse parte de algo, pertenecer, convivir y soñar», señala en un comunicado la organización. A la entrega de galardones en la categoría femenina le sucedieron los de la categoría masculina. El oro recayó en el nadador Guillermo Gracia, mientras que la plata fue para el gimnasta Eneko Lambea y el bronce para el golfista Javier Bethencourt. Al final de la ceremonia, el presidente de la Fundación, Francisco Belil, destacó que «este galardón reconoce a jóvenes deportistas de éxito que destacan por sus virtudes y valores, por su resiliencia, más allá de su currículum, por su capacidad de inspirar a otros jóvenes. Ellos nos recuerdan que el mayor valor no siempre se mide en medallas, sino en actitud, en esfuerzo, en corazón y en compromiso», mientras que Gerard Esteva, presidente de la Confederación de Uniones de Federaciones Deportivas de España, afirmó que los premiados y finalistas son «un ejemplo que el deporte es un pilar del estado del bienestar que se debe cuidar. Estamos muy contentos de ser una herramienta de transformación y formar parte de este espacio que potencia el talento joven».