Acaban de presentarse los ACTIVO Scoop, unos auriculares con cable que meten cinco altavoces en cada oído por un precio que parece una errata. Aparte de hacer que nos frotásemos los ojos con la comedida etiqueta, estos IEMs ofrecen una ficha técnica que normalmente vemos en equipos que triplican esa cifra. Pero lo más interesante no es lo que hacen, sino quién está detrás de su fabricación.La responsable es Astell&Kern, la firma coreana famosa por vender reproductores de audio que cuestan lo mismo que un coche de segunda mano. Como sus productos principales son inalcanzables para la mayoría, tuvieron que crear ACTIVO, una segunda marca diseñada específicamente para vender sonido de alta fidelidad a precios que no exijan pedir un crédito. Es su forma de bajar al barro para competir en el mercado de masas sin manchar su imagen de lujo exclusivo.Ingeniería de gama alta en una carcasa barata#gallery-1{margin:auto}#gallery-1 .gallery-item{float:left;margin-top:10px;text-align:center;width:33%}#gallery-1 img{border:2px solid #cfcfcf}#gallery-1 .gallery-caption{margin-left:0}Pulsa aquí para ver la galería de imágenes completaLa información técnica sale de eCoustics, donde explican que estos monitores intraaurales (IEM) utilizan una arquitectura híbrida de cinco vías. Dentro de cada auricular han embutido tres drivers dinámicos —uno de 8 mm y dos de 6 mm para graves y medios— y dos de tipo balanced armature para los agudos. Es una configuración compleja que busca separar las frecuencias para que la música tenga aire y detalle, algo muy difícil de encontrar en la gama de entrada.Para que tanto altavoz junto no suene como una jaula de grillos, han diseñado un circuito de cruce específico. El objetivo es que las ondas de sonido lleguen al tímpano a la vez y en fase, para que no perdamos detalle. Prometen un sonido natural y sin estridencias, siguiendo la línea de los ACTIVO Volcano, que ya demostraron que esta "marca blanca" de lujo va en serio a la hora de ofrecer rendimiento técnico sin inflar la factura.Lo más práctico es el cable. Viene con tres clavijas intercambiables: el jack de toda la vida de 3,5 mm, el balanceado de 4,4 mm y un conector USB-C nativo. Esto soluciona de un plumazo el debate sobre qué es mejor para escuchar música en el móvil, ya que puedes enchufarlos directamente al puerto de carga de tu teléfono sin comprar adaptadores externos ni perder calidad por la compresión del Bluetooth.A nivel eléctrico son muy agradecidos. Tienen una impedancia de 10 ohmios y una sensibilidad de 105 dB, lo que significa que suenan fuerte con cualquier cosa. No hace falta un amplificador dedicado como ocurre con algunos auriculares de driver planar como los de FiiO o electrostáticos como los de HIFIMAN; aquí basta con el propio cable USB-C que trae la caja o la salida de auriculares del portátil para moverlos con soltura.El precio de lanzamiento es de 80 dólares. A falta de confirmación oficial para nuestro mercado, el cambio directo ronda los 75 euros, aunque es probable que cuesten más que eso cuando lleguen a la UE debido a los impuestos y aranceles. Aún con ese sobrecoste, ofrecer cinco drivers y un cable modular en este rango es una rareza que demuestra cómo Astell&Kern ha encontrado la fórmula para vender su ingeniería a quienes no pueden pagarse sus productos habituales.El artículo Parece imposible por 75 euros: estos auriculares ponen 5 altavoces en tu oído para lograr un sonido de cine fue publicado originalmente en Andro4all.