Jerez respira aliviado después de que la AEMET haya desactivado al final de la tarde, y antes de lo previsto, todos los avisos meteorológicos en la ciudad y la campiña jerezana, tras una jornada marcada por numerosas incidencias menores provocadas por el fuerte viento y la lluvia. Aunque la alerta naranja mantuvo en vilo a los servicios de emergencia desde primera hora, finalmente no se registraron daños de gravedad.Desde las 07:29 de la mañana, los bomberos y operarios municipales tuvieron que atender una larga lista de actuaciones. En la calle Polar, un árbol caído sobre varios vehículos obligó a cortar el tráfico, mientras que minutos después, en la CA-3107, se detectó un cable colgando sobre la carretera. A media mañana, en la calle Zarza, se reportó el derrumbe de cascotes seguido de la caída de ramas y árboles en diferentes puntos de la ciudad.En la calle Vargas Llosa, un árbol estuvo a punto de desplomarse por el viento, y en la calle Torre Alháquime las ramas de varias palmeras cayeron frente a una residencia de ancianos. Ya por la tarde, en la calle Malvasía, otro árbol inclinado generó riesgo de caída sobre una vivienda, mientras que en la barriada La Teja los bomberos sofocaron un incendio de pastos.La jornada continuó con una antena de televisión a punto de caer en la calle Beato Juan Grande y una vía anegada por lluvia en la Calle Mérito. También la CA-4103 tuvo que ser cortada por acumulación de agua en El Portal, donde se inundó un campo, al igual que la Glorieta Cuatro Caminos y la avenida Alcalde Cantos Ropero. Todas, menores en comparación con otras ocasiones.A pesar de la intensidad del temporal, las autoridades locales han confirmado que todas las incidencias fueron leves. Solo se registró una anegación en un campo de El Portal como el suceso más destacado de la jornada.