Le propongo que juguemos a un juego. Es muy sencillo, casi cosa de parvulitos, pero a ver si así, cuando terminemos, sacamos los dos una conclusión. Puede, si quiere, y de hecho se lo recomiendo, hacer el ejercicio de leer los siguientes párrafos con la voz impostada de profesora de infantil de la ministra Yolanda Díaz. Ya, ya sé que ese tono de babero, potito y fila india puede resultar insufrible, pero, hágame caso, que la experiencia y el resultado mejoran de este modo. Esto consiste en que vayamos pensando cosas que no se pueden hacer porque, además de contradecir al sentido común, suponen un choque frontal contra lo práctico y lo útil. Cuanto más elementales, mejor. No se corte,... Ver Más