Las armas son cada vez más habituales entre los traficantes de escala media y baja que operan en Galicia. El último operativo antidroga desarrollado en Santiago de Compostela es un buen ejemplo: un narcopiso desmantelado en el barrio de Fontiñas ocultaba un pequeño arsenal compuesto por un revólver, una escopeta tipo carabina, un machete y varias armas blancas. El grupo de Estupefacientes de la Brigada de Policía Judicial, a partir de las numerosas actuaciones practicadas por la Brigada de Seguridad Ciudadana, llevaba meses siguiendo la pista. Y el pasado miércoles fue la fecha elegida por la Policía Nacional para culminar la operación. Los agentes irrumpieron de madrugada en el domicilio y, en el registro, además de las armas citadas, localizaron unas 500 dosis de cocaína preparadas para su venta , según informó la Policía Nacional este viernes en un comunicado. También intervinieron básculas de precisión y varios enseres que los investigadores sospechan que podrían ser el botín de algún robo. La principal hipótesis es que estos objetos habrían sido utilizados como forma de pago por algunos clientes del narcopiso para conseguir sus dosis. Llamó asimismo la atención que, junto al dinero en efectivo en euros, apareciera moneda de distintos países, como Vietnam, Marruecos, Estados Unidos, Argentina y Uzbekistán. Con la desarticulación del narcopiso, que registraba un constante trasiego de clientes tanto de día como de noche, los vecinos de la zona respiran aliviados. El detenido ya ha pasado a disposición del juzgado de guardia.