Él está felicísimo o más que eso porque su hermano mayor, Marc Márquez Alentá se haya convertido en el nuevo campeón del mundo de MotoGP, haya conquistado su noveno título mundial y, no solo eso, sino que supere, de forma espectacular, los peores momentos de su vida deportiva, resucitando con una fuerza descomunal y admirando al mundo por su perseverancia, fuerza, mentalidad, determinación y velocidad.Seguir leyendo....