Rafael Zornoza presentó su renuncia hace más de un año por haber cumplido ya 75, pero la Santa Sede la rechazó. Los expertos no se explican por qué no se tomaron medidas cautelares contra el todavía obispo de Cádiz, cuyo relevo, para el que hay candidatos, podría producirse antes de la llegada del nuevo nuncio a España, que está prevista para diciembreRafael Zornoza, el “obispo señorito” de Cádiz que suma una denuncia por pederastia a su polémica trayectoria Rafael Zornoza está de salida. De hecho, el todavía obispo de Cádiz y Ceuta lleva año y medio de prórroga después de que el 31 de julio de 2024 cumpliera 75 años y presentara la preceptiva renuncia ante la Santa Sede. Una renuncia que, en su día, no le fue aceptada, para disgusto de buena parte de los responsables de la Iglesia española, especialmente tras conocerse que el Vaticano ha ordenado una investigación canónica antes de decidir si abre un proceso contra el prelado, tras la denuncia por abusos de una víctima por hechos que tuvieron lugar hace tres décadas, mientras Zornoza ejercía como rector del Seminario de Getafe. “No es lo mismo que las acusaciones sean contra un obispo emérito que contra un prelado en ejercicio”, apuntan varios prelados a elDiario.es. Expertos canonistas aseguran “no explicarse” cómo no se han tomado medidas cautelares contra Zornoza cuatro meses después de que la denuncia llegara al dicasterio para la Doctrina de la Fe. Algo que parece podría cambiar en las próximas semanas. Tal y como ha podido saber este diario, la sustitución del obispo de Cádiz y Ceuta podría producirse en breve. Incluso, antes de la llegada del nuevo nuncio en España, Piero Pioppo, prevista antes de Navidad. En mentideros eclesiásticos se habla del obispo de Guadix, Francisco Jesús Orozco, como sustituto del prelado denunciado. Sea como fuere, la sensación de los expertos es que cualquier medida que se tome una vez conocido el escándalo “ya llega tarde”. Y es que, una vez que Roma recibió la denuncia (la víctima no se fio de ninguno de los organismos de denuncia gestionados por las diócesis o la propia Conferencia Episcopal), se activó un procedimiento que debía haber llevado al arzobispo de Sevilla –la diócesis de Cádiz es sufragánea de la de Sevilla– a abrir una investigación. Sin embargo, José Ángel Sáiz Meneses se inhibió, pasando entonces el caso al Tribunal de la Rota. España es el único país que cuenta con un tribunal de este tipo, que depende de la Nunciatura. Este tribunal es el que, a partir de ahora, habrá de tomar declaración a los afectados y decidir si hay base para abrir un proceso canónico contra el prelado, el primer obispo español acusado formalmente de abusos sexuales a menores. También, es la Rota quien debería imponer medidas cautelares una vez hecho público el caso. Por el momento, en lugar de ello, reina el silencio tanto en el Vaticano como en la diócesis de Cádiz, que se limitó a calificar de “muy graves y falsas” las acusaciones, y a informar que Zornoza suspende “temporalmente su agenda para el esclarecimiento de los hechos y para atender el tratamiento de un cáncer agresivo que está recibiendo”. Una enfermedad de la que nadie sabía nada hasta el momento en que El País publicó la denuncia de abusos. ¿Y qué dice la Conferencia Episcopal? Oficialmente, silencio y “respeto” a los procedimientos. Este lunes por la tarde, el presidente de la CEE, Luis Argüello, consideraba “verosímil” la denuncia contra Zornoza, aunque pidió respetar la presunción de inocencia del acusado. “El hecho de que la Santa Sede haya iniciado la investigación es que concede una verosimilitud a la acusación”, recalcó el arzobispo de Valladolid, quien pidió “acercarse al dolor de una posible víctima y al dolor de un obispo, al que pudiera habérsele acusado falsamente”. Argüello sí apuntó a la posibilidad de que Roma acepte pronto su renuncia: “Las posibilidades son altas, pero no depende de mí ni de la Conferencia”. Por su parte, el vicepresidente del episcopado, José Cobo, señalaba este martes su “confianza” en que el Tribunal de la Rota “resuelva con la rapidez que exige la investigación”. Cobo ha asegurado que el hecho de que el Vaticano haya decidido investigar a Zornoza por un presunto delito de abusos sexuales contra un menor cuando era sacerdote en Getafe en la década de los 90 es porque “tiene que haber verosimilitud” y se ha mostrado convencido de que la investigación será “muy exhaustiva y muy eficaz”. ¿A qué delitos podría enfrentarse Zornoza? Además de los presuntos abusos sexuales, la denuncia también habla de un mal uso del sacramento de la confesión, así como un claro ejemplo del ‘abuso espiritual’ que, como adelantó elDiario.es, el Papa quiere sancionar como delito en el Código de Derecho Canónico. Penas que podrían llevarle a perder la condición sacerdotal e, incluso, en los casos más extremos, la excomunión. Un nuevo sistema de reparación a las víctimas En mitad de este nuevo escándalo, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, se comprometió este martes con las asociaciones de víctimas de la pederastia clerical a crear un sistema mixto Iglesia-Estado, con participación de las víctimas y reparaciones a cargo de la Iglesia, durante un encuentro que mantuvo con 22 representantes de asociaciones de víctimas de abusos. El encuentro, calificado por ambas partes como “productivo y de confianza”, se produce después de que Gobierno e Iglesia hayan comenzado un proceso de negociación de cara a encontrar respuestas para un sistema de reparación integral. Durante la reunión, se explicó a las víctimas una propuesta que cumple con las recomendaciones del Defensor del Pueblo, que tendrá un papel determinante en el procedimiento, que tenga la última palabra. Esto es: un sistema mixto Iglesia-Estado en el que sea la Iglesia quien abone las reparaciones, en el que participen las víctimas, con voz y voto, y donde el Estado sea garante del cumplimiento. A lo largo de la reunión, el ministro Bolaños reiteró el compromiso del Gobierno con los supervivientes de la pederastia para “seguir dialogando con la Iglesia católica” para “alcanzar acuerdos que cumplan sus demandas históricas”, así como el de informarles de todos los avances que se produzcan. Por su parte, las víctimas (un total de 22) reclamaron al ministro la urgencia de una respuesta formal y definitiva para los supervivientes. “El Gobierno sigue estando comprometido. El plan Priva sigue siendo un fracaso”, declararon algunas de ellas. “Las víctimas no podemos aguantar más”, subrayaron. Toda la información en www.religiondigital.org